Mientras el número de casos confirmados se acerca a los 57,000, el director general de Salud ha reconocido que esta situación ha sobrepasado "la capacidad inicial con la que contaba Francia".
Las autoridades sanitarias de Francia confirmaron este miércoles que otras 500 personas han muerto en el último día en el país, lo que sitúa en más de 4,000 el número total de fallecidos desde que se detectó el primer caso de coronavirus.
En total son ya 4,032 los fallecidos después de que en las últimas 24 horas se registraran 509 muertes, tal y como informó el director general de Salud de Francia, Jérôme Salomon, que tildó la situación de "totalmente excepcional".
Así, explicó que hay 24,639 personas hospitalizadas, des las cuales 6,017 se encuentran en estado grave en cuidados intensivos.
"Son más que la capacidad inicial con la que contaba Francia", observó Salomon antes de destacar que, sin embargo, 10,935 personas se han recuperado.
Los laboratorios del país, capaces de realizar unas 20,000 pruebas al día, han confirmado que el número de casos ha ascendido a los 56,989.
"Situación sin precedentes"
Por su parte, el primer ministro, Edouard Philippe, alertó de que existe una alta probabilidad de que la vuelta a la normalidad y el "fin del confinamiento" no tenga lugar "de una sola vez y para todos".
Así lo explicó ante la Asamblea Nacional, donde declaró que la situación que atraviesa el país "no tiene precedentes" y que "ningún sistema de salud en el mundo ha sido construido para enfrentarse a la situación actual".
En este sentido, indicó que se han registrado 359,000 infracciones durante la cuarentena entre los días 17 y 31 de marzo. "La Policía debe ser exigente con esto", manifestó.
Para el mandatario, el confinamiento tendrá consecuencias "extremadamente duras" para la economía. "Está claro que la crisis sanitaria se agravará con una crisis económica y tal vez, incluso, financiera", aseveró.
(Europa Press)
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