En las últimas semanas, las autoridades han detenido a varias personas relacionadas a este culto apocalíptico.
Europa se encuentra en alerta por el resurgimiento en varios países del continente de la secta japonesa Aum Shinrikyo, un culto apocalíptico fue responsable de un ataque mortal con gas sarín en el metro de Tokio, en 1995.
Según informa la BBC, a finales de marzo Montenegro expulsó a 58 extranjeros sospechosos de asociación con Aum Shinrikyo. Estas personas se habían reunido en un hotel de ese pequeño país de la exYugoslavia.
Entre los intervenidos, había cuatro personas de Japón, 43 de Rusia, siete de Bielorrusia, tres de Ucrania y uno de Uzbekistán, detalló el ministerio del Interior.
En tanto, esta semana la Policía rusa ejecutó varias redadas en propiedades vinculadas con la secta en el país. Diez personas fueron detenidas y varias decenas están siendo investigadas.
El grupo es ilegal en Rusia pero, según la fiscalía, es posible que tenga hasta 30.000 seguidores allí, donde ha estado presionando para obtener donaciones de la gente.
Las autoridades han abierto una investigación criminal porque creen que las actividades del grupo “comportan violencia y daños a la salud de ciudadanos”, reportaron medios estatales, según la BBC.
¿Qué es Aum Shinrikyo?
Aum Shinrikyo significa “verdad suprema” y empezó sus actividades en la década de los 80 como un grupo espiritual que aunaba creencias hindúes y budistas. Su fundador, Shoko Asahara, aseguraba ser al mismo tiempo Cristo y el primer “iluminado” desde Buda.
El grupo se convirtió oficialmente en una organización religiosa en Japón en 1989. Asahara construyó una base de seguidores en todo el mundo considerable, hablando en universidades y escribiendo libros.
Sin embargo, el grupo se convirtió poco a poco en un culto del apocalipsis, convencido de que el mundo iba a terminar en una Tercera Guerra Mundial y de que solo ellos sobrevivirían.
Esta distorsión también se tradujo en violencia, secuestrando, hiriendo y matando a sus rivales, incluso utilizando agentes químicos y biológicos en algunos ataques.
De hecho, el 20 de marzo de 1995 miembros de la secta soltaron bolsas llenas del agente nervioso gas sarín en el metro de Tokio, dejando 12 personas muertas y cientos de heridos.
Muchos miembros de “Aum”, como también se le conoce a la secta, fueron juzgados por el ataque: 13 fueron condenados a morir, incluido Asahara, que sigue en el corredor de la muerte.
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