Los cancilleres de ambos países enfrentaron posiciones por la controversia sobre aguas del río Silala.
Los cancilleres David Choquehuanca (Bolivia) y Heraldo Muñoz (Chile) intercambiaron declaraciones hoy en la sesión plenaria de la 46 Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) que tiene lugar aquí.
Posición boliviana. Choquehuanca ratificó que el agua del río Silala pertenece a Bolivia, a lo que Muñoz respondió que se trata de un tema bilateral que no debe ser manejado en el seno de la OEA. El canciller boliviano formuló una denuncia por supuestos atropellos de Chile contra su país, tema vinculado a la demanda marítima interpuesta por Bolivia ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya (CIJ). Dijo estar optimista de que el derecho internacional haga justicia, invitó a todos los Estados a alentar los esfuerzos que realiza Bolivia para encontrar una solución efectiva y conveniente entre ambos países.
Posición chilena. Inmediatamente el canciller Muñoz respondió asegurando que "una vez más Bolivia ha traído a esta asamblea general un asunto bilateral que no le compete a la OEA". Muñoz consideró que "no hay nada pendiente entre Chile y Bolivia porque todos los asuntos fronterizos quedaron zanjados en 1904, hace más de 110 años, en un tratado que fijó de manera perpetua y definitiva las fronteras". Reiteró el ofrecimiento de restablecer relaciones diplomáticas sin condiciones y pidió a su par boliviano respetar a los chilenos en vez de insultarlos con esos reclamos.
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