Unicef señaló que la inversión en la salud materna e infantil puede evitar la muerte de unos 200,000 niños menores de 5 años cada año en la región.
La inversión en la salud materna e infantil puede evitar la muerte de unos 200,000 niños menores de 5 años cada año en Latinoamérica, donde el lugar y condiciones al nacer definen la probabilidad de supervivencia y desarrollo debido a la inequidad entre y dentro de los países, alertó Unicef.
"Claramente tenemos una región desigual, con marcada inequidad para madres y niños en sus propios países", dijo Luisa Brumana, asesora en Salud de Unicef para Latinoamérica y el Caribe, al citar el informe "Reducir las diferencias: El poder de invertir en los niños más pobres".
Panorama sombrío. "Hay muchas inequidades que deben ser prioridad para los Gobiernos, llegar a los que más sufren, que son los niños pobres, con madres con baja escolaridad y muchos de ellos de minorías étnicas como los indígenas", dijo la epidemióloga.
Según datos de Unicef, se estima que en América Latina 196.000 niños menores de 5 años mueren cada año por causas prevenibles, de los cuales 167.000 (85 %) tienen menos de un año, es decir que en la región muere un niño cada tres minutos.
Pide más inversión en salud. "Que tengamos casi 200.000 niños que mueren y que esas muertes sean prevenibles es alarmante, eso no debería pasar, hay formas de evitarlo", afirmó Brumana, al insistir en que los "países deben entender que la inversión no solo es moral porque hay un retorno al evitar la enfermedad y miles de muertes".
Así lo resalta el informe de Unicef al señalar que "las inversiones en poblaciones de niños y madres pobres, por cada millón invertido, salvan el doble de vidas de menores de 5 años que una inversión equivalente en otras que no son pobres", "De las 1,1 millones de vidas salvadas en los 51 países estudiados durante el último año, casi el 85 % se encontraba entre los pobres", agrega el documento. (EFE)
Comparte esta noticia