A propósito de la reunión que tendrán este jueves los presidentes Juan Manuel Santos y Nicolás Maduro para hablar sobre una posible reapertura de su frontera, recordamos por qué Venezuela ordenó el cierre de su frontera con Colombia hace casi ya un año.
Los presidentes de Colombia, Juan Manuel Santos, y de Venezuela, Nicolás Maduro, se reunirán este jueves en la localidad venezolana de Puerto Ordaz para "evaluar la situación de la frontera" común, cerrada desde el 19 de agosto del año pasado por decisión de Caracas.
Temas que se abordarán en la reunión. Los gobernantes revisarán la implementación del conjunto de medidas acordadas previamente por las cancillerías que permitirán contar con una frontera legal, segura y organizada. Santos y Maduro revisarán también los avances en temas de seguridad, migratorios, aduaneros, económicos, comerciales, de controles cambiarios entre divisas, de salud y transporte en la zona de frontera.
El cierre de la frontera. El pasado 19 de agosto de 2015, Maduro ordenó el cierre de la frontera entre el estado de Táchira y el departamento colombiano de Norte de Santander, el principal entre ambos países. Maduro tomó esa decisión para combatir el contrabando y la presencia de paramilitares colombianos en las zonas limítrofes. Posteriormente, extendió la medida a otros puntos fronterizos. La decisión devino en la deportación de unos 1600 colombianos de Venezuela, mientras que otros 19 mil dejaron ese país por su cuenta para no correr la misma suerte, lo que causó una crisis diplomática entre los dos países.
¿Qué provocó el cierre de la frontera? El 19 de agosto de 2015 en San Antonio del Táchira, dos hombres en motocicleta, que según el Gobierno de Venezuela eran paramilitares y contrabandistas, atacaron con armas e hirieron a tres militares y un civil que realizaban operaciones anti-contrabando. Ese mismo día, el gobierno venezolano ordenó el despliegue policial contra de bandas delincuenciales en los dos municipios venezolanos fronterizos (San Antonio del Táchira y Ureña). Como parte de esa operación se ordenó el cierre, durante 72 horas, de la frontera. Al día siguiente, Maduro dijo que "los atentados contra los militares venezolanos se suman a una cadena de hechos contra el pueblo de la frontera tachirense y zuliano". Además dijo que la causa de la inseguridad y la crisis económica en la frontera era la supuesta migración de paramilitares colombianos a Venezuela. Por lo tanto ordenó la militarización de la frontera.
Tensión entre Colombia y Venezuela. El 21 de agosto el gobierno venezolano anunció la implantación del estado de excepción durante 60 días en los municipios Bolívar, Ureña, Junín, Libertad e Independencia, todos ellos del estado fronterizo de Táchira. Según Maduro, "para restablecer el orden, la paz, la tranquilidad, la justicia y una frontera verdaderamente humana". Esta decisión unilateral de Caracas, elevó la tensión con Colombia. De hecho, Juan Manuel Santos exigió una mayor colaboración entre Colombia y Venezuela con el fin de luchar más eficazmente contra las actividades de la guerrilla, paramilitares, narcotraficantes y contrabandistas.
Deportación de colombianos. Tras la declaración de estado de emergencia, Venezuela puso en marcha la "Operación de Liberación del Pueblo" en busca de paramilitares colombianos en las zonas fronterizas de Táchira, donde el 90% residentes eran de nacionalidad colombiana. Como parte de esa operación, Venezuela deportó a 185 colombianos a su país y apresó a ocho miembros de la banda paramilitar colombiana "Los Urabeños". Los deportados denunciaron maltrato físico y verbal por parte de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) durante el proceso de deportación. Muchas familias fueron separadas, pues los padres colombianos fueron deportados a Colombia sin sus hijos cuando estos tenían la nacionalidad venezolana.
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