El gobernador regional, Edwin Licona, dijo que local brindará apoyo a los afectados por un mes. Se indican que en total son doce niños y jóvenes, que de la noche a la mañana perdieron a sus padres.
Tras el trágico accidente ocurrido en la carretera Livitaca-Santo Tomás, en el que perdieron la vida padres y madres de familia dejando en la orfandad a más de una docena de niños y jóvenes, el gobernador regional del Cusco, Edwin Licona Licona, dispuso la instalación de un comedor infantil en la zona para dotar de alimentación a los deudos, apoyo que será extendido por un mes.
“Es lamentable la situación que atraviesan los menores, ellos cuentan con todo nuestro apoyo, mientras tanto se está viendo la posibilidad de que los parientes más cercanos se hagan cargo de ellos”.
“En caso de que esta primera solución no sea viable, los niños serán trasladados a los albergues infantiles, pero de ninguna manera quedarán desamparados”, remarcól.
Edwin Licona, dijo que para apoyar a los deudos de las personas fallecidas, este sábado se realizará una campaña de solidaridad, la misma que tendrá lugar en la plaza Túpac Amaru, distrito de Wanchaq, a partir de las 09:00 de la mañana. El apoyo consistirá en alimentos no perecibles y ropa abrigadora.
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