El padre Carlos Tolentino señaló que los devotos no podrán comer, ni beber, antes ni durante la procesión de santos y vírgenes en la Plaza de Armas de la ciudad.
Devotos de las catorce imágenes que el próximo jueves participarán en el tradicional Corpus Christi en Cusco, no podrán reunirse para celebrar a sus santos patronos en sectores adyacentes a la Basílica Catedral, con el fin de preservar la limpieza y el orden del recinto religioso.
“Estará totalmente prohibido comer o beber antes y durante la procesión del Corpus Christi, esto ya se ha comunicado a los mayordomos oportunamente así como a la policía”, expresó el representante de la iglesia, Carlos Tolentino.
Indicó que el objetivo es respetar los templos para evitar algunos excesos, como la contaminación generada por malas prácticas.
“Nadie les prohíbe reunirse a los fieles, pero que lo hagan en lugares particulares no en vías públicas porque se da mala imagen”, comentó el padre Tolentino.
El Corpus Christi en el Cusco se inicia con una misa celebrada por Monseñor Juan Antonio Ugarte Pérez, quien luego encabeza la procesión del Santísimo Sacramento dentro de una carroza de plata que se moviliza por el perímetro de la Plaza de Armas. Para finalizar salen los catorce santos con un similar recorrido.
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