Los vecinos de las zonas altoandinas de Huancavelica exigen a las autoridades la instalación de pararrayos para proteger a las comunidades vulnerables.
Las lluvias intensas que azotan Huancavelica desde diciembre de 2024 han dejado un saldo trágico en esta región andina. Hasta la fecha, se reportan cinco muertos por el impacto de rayos, todos en zonas rurales donde la población depende de la agricultura y la ganadería.
La víctima más reciente, Estela de la Cruz Gala (32), falleció esta semana tras ser alcanzada por un rayo en el centro poblado de Castillapata, distrito de Yauli, alrededor de las 7: 00 p.m., según el Centro de Operaciones de Emergencias Regional (COER).
En los cuatro casos anteriores, los fallecidos fueron ganaderos sorprendidos por tormentas eléctricas mientras pastaban su ganado en campo abierto, algunos junto a sus ovejas.
Ante esta situación, los pobladores de las zonas altoandinas exigen a las autoridades la instalación de pararrayos para proteger a las comunidades vulnerables.
Miles de afectados en Huancavelica
El Centro de Operaciones de Emergencias Nacional (COEN) informó que las lluvias han generado 3000 atenciones por emergencias en la región. Según el COER, entre diciembre y febrero se registran 5 510 personas damnificadas, 5 fallecidos, un desaparecido y 27 256 afectados. Además, 890 viviendas quedaron destruidas, 2 572 inhabitables y 14 370 dañadas. Las precipitaciones también afectaron templos, centros comunales, municipalidades y otras infraestructuras.
La agricultura familiar, pilar económico y alimenticio de Huancavelica, enfrenta pérdidas devastadoras. El Sistema Nacional de Información para la Prevención y Atención de Desastres (Sinpad) reporta 25 hectáreas de cultivos destruidas y 364 afectadas. Sin embargo, la Dirección Regional Agraria eleva la cifra a 371 hectáreas perdidas solo en el distrito de Acorias, tras una granizada que arrasó con cultivos de papa, cebada, habas, olluco, mashua y maíz.
Infraestructura y vías colapsadas
Las lluvias también han dañado 31 855 metros de carreteras por huaicos y colapsos de plataformas. Asimismo, el río Mantaro, a la altura del distrito de Comes, se desbordó recientemente tras el incremento de su caudal, agravando la emergencia. Clodoaldo Chanchas, responsable de la Oficina de Defensa Civil, señaló que las cifras de daños podrían ser mayores debido a la deficiencia de los secretarios técnicos locales para reportar al Sinpad.
Con la temporada de lluvias golpeando duramente a Huancavelica, las autoridades enfrentan el desafío de atender a la población y mitigar las pérdidas en un contexto de vulnerabilidad económica y climática. La instalación de medidas preventivas, como pararrayos, y una respuesta efectiva serán clave para evitar más tragedias.
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