La Fiscalía pedía cinco años de pena privativa efectiva por colusión.
En el área de Observación del establecimiento penitenciario de Chiclayo (región Lambayeque) permanecerá por algunos días, Norma Katiuska Del Castillo Muro, luego que el Poder Judicial le impusiera tres años, diez meses y nueve días de prisión efectiva.
La próxima semana, el Consejo Técnico determinará el alero del Pabellón de Mujeres, al cual será derivada en su condición de sentenciada por el delito de colusión simple. Es la segunda vez que la pareja del recluso exalcalde de Chiclayo, Roberto Torres, ingresa al penal.
El 30 de septiembre del 2014 fue detenida y posteriormente internada por el caso “Los Limpios de la Corrupción”, donde cumplió prisión preventiva hasta el 31 de octubre del año pasado, fecha en la que recobró su libertad por exceso de carcelería.
Estuvo sujeta a reglas de conducta por mandato judicial y en estos siete meses, junto a su madre, optó por trabajar, confeccionando peluches, sábanas y otros productos.
“Ella decidió atribuirse responsabilidad, porque la Fiscalía pedía cinco años”, dijo una de las personas de su entorno, que participó en la audiencia desarrollada en los ambientes judiciales de la cárcel, ubicada en el distrito de Picsi.
Otros sentenciados. Por el mismo proceso y delito fueron condenados el exfuncionario edil, Segundo Alcántara Chávez, y el contratista, Salvador Fernández Montenegro. Recibieron tres años con diez meses de pena; pero suspendida en su ejecución.
Los tres sentenciados, quienes de acogieron a la figura procesal de conclusión anticipada de juicio, son sindicados de pertenecer a la organización delictiva “Los Limpios de la Corrupción”.
El Décimo Juzgado Unipersonal Especializado en Delitos de Corrupción, también declaró reos contumaces a Fernando Fernández Bravo y Carlos Mendoza Oliden. El juicio continuará la próxima semana con los acusados, Roberto Torres, César Regalado y Ernesto Sánchez Vásquez.
Proceso. A los exfuncionarios ediles, Roberto Torres Gonzales, César Regalado Rodríguez, Carlos Mendoza Oliden, Ernesto Sánchez Vásquez, Segundo Alcántara Chávez y Fernando Fernández Bravo se les atribuye haber concertado con Salvador Fernández, a través de Norma Katiuska del Castillo, otorgar la buena pro para la ejecución de la obra “Mejoramiento de la transitabilidad peatonal del pueblo joven San Cristian”, a la empresa Inversiones y Construcciones Sicán.
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