El ministro de Salud, Alberto Tejada, advirtió que son más de un millón de peruanos que sufren algún tipo de adicción, mientras que el 30% de la población urbana tiene problemas de salud mental.
El ministro de Salud, Alberto Tejada, sostuvo hoy que la nueva política de salud mental será haciendo labor comunitaria, en la cual los psicólogos y psiquiatras participen directamente con los pobladores, ya que los verdaderos problemas están en los hogares.
“La nueva visión en salud mental es no hospitalaria, ‘extramuro’, que el hospital salga a hacer labor comunitaria porque la violencia, la inseguridad, el tema familiar está en casa y se debe reforzar la atención ambulatoria”, manifestó.
En diálogo con RPP Noticias, indicó que se ha comenzado a desarrollar un trabajo territorial en 141 módulos de salud mental de todo el país, 6 en Lima, a través de estrategias de la red de municipalidades saludables, a fin de trabajar con los alcaldes los factores de riesgo.
Invocó además a que los centros de rehabilitación de las comunidades terapéuticas se formalicen ante el Ministerio de Salud, ya que se les brindará capacitaciones a sus profesionales.
Advirtió que son más de un millón de peruanos que sufren algún tipo de adicción, mientras que el 30% de la población urbana tiene algún tipo de problema en salud mental, como trastorno de sueño, ansiedad de rasgo, depresión, distimia (trastorno afectivo de carácter depresivo crónico), alcoholismo y ludopatía.
Tejada destacó el compromiso del gobierno con el sector salud, incrementando el presupuesto a fin de aplicar el nuevo enfoque de trabajo, en el cual se debe mejorar la atención en los establecimientos.
Respecto a la responsabilidad de la falta de fiscalización en el centro ‘Cristo es amor’, donde fallecieron 27 personas en un incendio, dijo que esta labor es de la Policía Municipal adscrita a la Municipalidad de San Juan de Lurigancho.
Reiteró que el Minsa remitió en agosto del 2011 un documento a la municipalidad para la fiscalización de establecimientos de salud médicos de apoyo público y privado del distrito, y no se mencionó nunca este local.
En la víspera, la municipalidad de San Juan de Lurigancho responsabilizó al Ministerio de Salud por el funcionamiento del referido centro al señalar que era su función la fiscalización.
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