El Tribunal Supremo analizará el recurso de apelación que presentó Sánchez Palomino para revocar la resolución que emitió el juez supremo Juan Carlos Checkley el 11 de julio del 2024.
La suerte del congresista y exministro Roberto Sánchez quedó en poder de la Sala Penal Permanente de la Corte Suprema que evaluará este martes 28 de enero si ordena o no excluirlo del proceso penal que se le sigue junto al expresidente Pedro Castillo y otros por el fallido golpe de Estado del 7 de diciembre del 2022.
En una audiencia virtual, a realizarse desde las nueve de la mañana, el Tribunal Supremo analizará el recurso de apelación que presentó Sánchez Palomino para revocar la resolución que emitió el juez supremo Juan Carlos Checkley el 11 de julio del 2024, en la que declaró infundado un recurso de excepción de improcedencia de acción que presentó para que se archive el delito de rebelión que le atribuye la Fiscalía y sea excluido de este proceso penal.
La defensa legal de Sánchez sostiene que el juez Checkley Soria realizó un análisis que no planteó, que la conducta atribuida a su patrocinado no se subsume en el delito de rebelión y que existe una falta de precisión en la imputación formulada contra su defendido, por lo que demanda que la siguiente instancia revoque la resolución apelada y estime su pretensión.
La Sala Suprema también evaluará este martes el recurso de apelación que presentó el teniente PNP Eder Infanzón para que se revoque el extremo de la resolución emitida por el juez Checkley en la que declaró infundado el recurso de excepción de improcedencia de acción que presentó para que se archive el delito de rebelión que le imputa la Fiscalía y también sea excluido de este proceso penal.
La defensa legal de Infanzón Gómez demanda que la siguiente instancia revoque la resolución apelada y se estime su pretensión, al considerar que dicho magistrado realizó un juicio de control sin que se respeten las garantías mínimas del debido proceso y la motivación de las resoluciones; que el razonamiento de la resolución apelada no es lógico y omitió cómo es que la conducta presuntamente cometida por su defendido está incursa en el delito de rebelión; que lo descrito por el fiscal no permite entender que se levantó en armas para derrocar al gobierno durante su servicio policial y que formó parte de una voluntad previa para derrocar al Gobierno.
El colegiado supremo escuchará este martes los argumentos de las partes involucradas a fin de emitir una decisión final al respecto en los próximos días.
La Segunda Fiscalía Suprema Transitoria Especializada en Delitos Cometidos por Funcionarios Públicos pidió 25 años de prisión contra Sánchez e Infanzón, así como su inhabilitación por dos años y seis meses para ejercer cargo público al acusarlos como presuntos coautores del delito de rebelión en agravio del Estado.
Comparte esta noticia