´Tienen 15 o más veces la masa de nuestro Sol y pueden superar su brillo en más de un millón de veces´, informan científicos.
Las estrellas más brillantes del Universo no viven solas, tienen una compañera con la cual pueden interactuar y afectar el desarrollo de otras estrellas cercanas.
Científicos holandeses, a través del sistema de cuatro telescopios del Observatorio Europeo Austral, en Chile, lograron observar que tres de cada cuatro gigantes azules forman parte de un sistema binario en el que otra estrella menor ‘vampiriza’ su materia hasta dejarla exhausta. Este hallazgo ayudará a comprender cómo se forman y evolucionan las galaxias.
Se ha estudiado con detalle un buen número de estrellas del tipo O, las más grandes y brillantes. Las estrellas de la clase O suelen tener una vida muy corta, pero tensa.
‘Estas estrellas son auténticos monstruos’, señala el científico Hughes Sana, de la Universidad de Ámsterdam, quien lidera este trabajo. ‘Tienen 15 o más veces la masa de nuestro Sol y pueden superar su brillo en más de un millón de veces. Estas estrellas son tan calientes que brillan con una intensa luz blanquiazul y tienen temperaturas superficiales de 30.000 grados Celsius’.
Las estrellas de masa menor suelen funcionar como vampiros: atraen el hidrógeno de las capas superficiales de su vecino más grande. La nueva sangre les rejuvenece y les permite vivir más de lo que vivirían estando solas.
Al mismo tiempo, las estrellas víctimas, al quedarse sin su capa de hidrógeno que es más fría en comparación con el núcleo, empiezan a parecer más calientes y más azules, lo que les da un aspecto más joven.
Los astrónomos calculan que hasta el 30% de las estrellas hipergigantes están relacionadas con eventos violentos.
Además, hasta en 50% de los casos hay una relación de "vampirismo". Aunque son relativamente pocas, las estrellas hipergigantes afectan mucho sus alrededores.
Los vientos solares y golpes de partículas pueden tanto impulsar como detener la formación de otra estrella y su radiación potencia el resplandor de las nebulosas brillantes.
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