´Empezaremos enviando astronautas a un asteroide(..). Luego vendrá el aterrizaje en suelo de Marte´, señaló el presidente de norteamericano.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, presentó hoy su plan para el porvenir de la agencia espacial estadounidense (NASA), que prevé el envío de misiones tripuladas a Marte para mediados de la década de 2030.
En un discurso en el Centro Espacial Kennedy, en Cabo Cañaveral (Florida), Obama, acompañado de Buzz Aldrin, uno de los tripulantes de la misión Apolo que llevó al hombre a la Luna, afirmó que "la exploración espacial es una parte imprescindible del futuro".
"Cuando comience la próxima década, los vuelos de prueba ensayarán los dispositivos necesarios para una exploración más allá de la baja órbita terrestre, y para 2025 esperamos que las nuevas naves espaciales nos permitan enviar misiones tripuladas al espacio sideral, más allá de la Luna", declaró el mandatario estadounidense.
"Empezaremos enviando astronautas a un asteroide por primera vez en la Historia. Para mediados de la década de 2030 creo que podremos enviar misiones tripuladas a la órbita de Marte y conseguir que vuelvan sanas y salvas a la Tierra", agregó.
A ello le seguirá "el aterrizaje en suelo de Marte", prometió el presidente de 48 años, quien bromeó con que tiene "toda la intención de vivir para verlo".
"Estoy comprometido al ciento por ciento con la misión de la NASA y su futuro", aseguró Obama, en un discurso en el que respondía a las críticas que ha recibido su plan por poner fin al proyecto "Constellation", un programa lanzado en 2004 por el entonces presidente, George W. Bush, para reemplazar los transbordadores espaciales y enviar al hombre de nuevo a la Luna para 2020.
"Nadie está más comprometido que yo con las misiones espaciales tripuladas", insistió, antes de subrayar que no obstante deben "hacerlo de manera sensata".
En su presupuesto para 2011 Obama aumentó los recursos de la NASA en 6.000 millones de dólares, pero no asignó fondos para "Constellation", un programa que entre otras cosas debía diseñar un nuevo modelo de transbordador que sustituyera en 2015 a los actuales, que quedarán jubilados a finales de este año.
Una comisión encargada por Obama determinó en agosto pasado que el programa de transbordadores había acumulado ya un retraso de al menos tres años, mientras las ambiciones de enviar al hombre a la Luna no podrían verse cumplidas al menos hasta 2030.
La cancelación de "Constellation" ha sido acogida con división de opiniones, y mientras algunos expertos consideran que el nuevo plan -que adjudica un papel mucho mayor al sector privado en el lanzamiento de cohetes espaciales- es correcto, otros creen que asesta un golpe mortal a la razón de ser de la NASA, los vuelos espaciales tripulados.
Esta semana, tres destacados astronautas enviaron una carta abierta a Obama en la que afirmaron que podría significar la pérdida del liderazgo espacial de Estados Unidos.
Obama aseguró hoy que su plan es "atrevido". "Queremos lograr avances, una NASA moderna... no podemos seguir haciendo lo mismo de siempre".
Entre otras cosas, propuso "la exploración robotizada del sistema solar, el envío de una sonda a la atmósfera del Sol, nuevas misiones de exploración a Marte y otros destinos, y un telescopio de nueva generación que tome el testigo del Hubble".
La propuesta presidencial prevé que la NASA centre más sus investigaciones en el desarrollo de nuevas tecnologías, mientras que el envío de cohetes al espacio se apoyaría más en el sector privado.
También asigna 40 millones de dólares para un programa de capacitación de los trabajadores de la industria espacial de Florida que perderían su empleo cuando cesen las operaciones de los transbordadores actuales a finales de este año.
Pero su proyecto, aseguró, también permitirá crear empleo. Según el mandatario, su propuesta creará 2.500 puestos de trabajo más en los próximos dos años que el programa que defendía Bush.
Obama abogó porque su plan no prevea nuevas misiones tripuladas a la Luna: "voy a ser franco... ya hemos pasado por eso, ya hemos estado allí. Buzz Aldrin ya ha estado allí", indicó.
EFE
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En un discurso en el Centro Espacial Kennedy, en Cabo Cañaveral (Florida), Obama, acompañado de Buzz Aldrin, uno de los tripulantes de la misión Apolo que llevó al hombre a la Luna, afirmó que "la exploración espacial es una parte imprescindible del futuro".
"Cuando comience la próxima década, los vuelos de prueba ensayarán los dispositivos necesarios para una exploración más allá de la baja órbita terrestre, y para 2025 esperamos que las nuevas naves espaciales nos permitan enviar misiones tripuladas al espacio sideral, más allá de la Luna", declaró el mandatario estadounidense.
"Empezaremos enviando astronautas a un asteroide por primera vez en la Historia. Para mediados de la década de 2030 creo que podremos enviar misiones tripuladas a la órbita de Marte y conseguir que vuelvan sanas y salvas a la Tierra", agregó.
A ello le seguirá "el aterrizaje en suelo de Marte", prometió el presidente de 48 años, quien bromeó con que tiene "toda la intención de vivir para verlo".
"Estoy comprometido al ciento por ciento con la misión de la NASA y su futuro", aseguró Obama, en un discurso en el que respondía a las críticas que ha recibido su plan por poner fin al proyecto "Constellation", un programa lanzado en 2004 por el entonces presidente, George W. Bush, para reemplazar los transbordadores espaciales y enviar al hombre de nuevo a la Luna para 2020.
"Nadie está más comprometido que yo con las misiones espaciales tripuladas", insistió, antes de subrayar que no obstante deben "hacerlo de manera sensata".
En su presupuesto para 2011 Obama aumentó los recursos de la NASA en 6.000 millones de dólares, pero no asignó fondos para "Constellation", un programa que entre otras cosas debía diseñar un nuevo modelo de transbordador que sustituyera en 2015 a los actuales, que quedarán jubilados a finales de este año.
Una comisión encargada por Obama determinó en agosto pasado que el programa de transbordadores había acumulado ya un retraso de al menos tres años, mientras las ambiciones de enviar al hombre a la Luna no podrían verse cumplidas al menos hasta 2030.
La cancelación de "Constellation" ha sido acogida con división de opiniones, y mientras algunos expertos consideran que el nuevo plan -que adjudica un papel mucho mayor al sector privado en el lanzamiento de cohetes espaciales- es correcto, otros creen que asesta un golpe mortal a la razón de ser de la NASA, los vuelos espaciales tripulados.
Esta semana, tres destacados astronautas enviaron una carta abierta a Obama en la que afirmaron que podría significar la pérdida del liderazgo espacial de Estados Unidos.
Obama aseguró hoy que su plan es "atrevido". "Queremos lograr avances, una NASA moderna... no podemos seguir haciendo lo mismo de siempre".
Entre otras cosas, propuso "la exploración robotizada del sistema solar, el envío de una sonda a la atmósfera del Sol, nuevas misiones de exploración a Marte y otros destinos, y un telescopio de nueva generación que tome el testigo del Hubble".
La propuesta presidencial prevé que la NASA centre más sus investigaciones en el desarrollo de nuevas tecnologías, mientras que el envío de cohetes al espacio se apoyaría más en el sector privado.
También asigna 40 millones de dólares para un programa de capacitación de los trabajadores de la industria espacial de Florida que perderían su empleo cuando cesen las operaciones de los transbordadores actuales a finales de este año.
Pero su proyecto, aseguró, también permitirá crear empleo. Según el mandatario, su propuesta creará 2.500 puestos de trabajo más en los próximos dos años que el programa que defendía Bush.
Obama abogó porque su plan no prevea nuevas misiones tripuladas a la Luna: "voy a ser franco... ya hemos pasado por eso, ya hemos estado allí. Buzz Aldrin ya ha estado allí", indicó.
EFE
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