ZTE nos comparte su último modelo lanzado en el mercado peruano. El ZTE Blade V40s no quiere ser solo una cara bonita y va de lleno contra la competencia. ¿Le alcanzará?
Los usuarios que buscan teléfonos de gama media en el mercado peruano tienen ya una enorme baraja de posibilidades. Una de ellas es la que ofrece la marca china ZTE, una empresa que, pese a su longevidad, sigue de pie compitiendo de igual a igual contra las ahora ya consolidadas.
Por un lado, busca atraer clientes con sus bajos precios y, por otro, con sus diseños llamativos y colores distintivos. Estas claves podemos verlas en el ZTE Blade V40s, equipo que tenemos en reseña en NIUSGEEK y del cual te contaremos sus detalles. ¿Vale la pena ir por este celular?
Especificaciones del ZTE Blade V40s
- Pantalla: AMOLED 6,67" Full HD+
- Dimensiones y peso: 163,50 x 75,8 x 7,60 mm / 184 g
- Procesador: Unisoc T618
- RAM: 6 GB
- Almacenamiento: 128 GB
- Cámara frontal: 8 MP
- Cámara trasera: 50 MP / 2 MP bokeh / 5 MP macro
- Batería: 4500 mAh / Carga rápida 22,5W
- SO: Android 12
- Conectividad: 4G / Wi-Fi / Bluetooth / NFC / USB-C
Diseño
Para ser sincero desde un principio, es el ZTE más bonito que he reseñado hasta la fecha.
Me gusta mucho cómo se ve este equipo. Por la parte trasera, nos tocó el modelo en color celeste, pero este no es uniforme, sino que forma una especie de degradado que va decayendo de abajo hacia arriba. Además, tiene una subdivisión al lado izquierdo del equipo que lo marca de forma ‘metálica’ en sentido vertical.
La iluminación incluso te permitirá mirarlo en tonalidades amarillas en ciertas oportunidades, por lo que recomiendo usarlo con un case o funda (como el que viene con el equipo) que permita visibilizar estas particularidades.
El módulo de cámaras traseras también es peculiar: está conformado por dos áreas circulares en la parte superior derecha. El primero es exclusivo para el lente principal de 50MP, mientras que el inferior se compone de los otros dos sensores más el flash. Cuando la batería está baja o hay alguna notificación clave, el borde del círculo superior se enciende, dándonos un bonito aviso visual extra.
La pantalla es un AMOLED con bordes ligeramente curvados que ocupa un 87 % de todo el equipo, una buena distribución para múltiples propósitos. Perforado al medio de la zona superior se encuentra el lente frontal.
Vamos por las laterales. Tenemos un micrófono en la de arriba; un botón de bloqueo más sensor de huellas al lado derecho; el único altavoz, el puerto USB-C y la ranura para SIM y microSD en la parte baja; y los botones de volumen en el lado izquierdo. ¿Cosas que criticar? Primero, aún no me acostumbro a dejar sentir los botones de +/- encima del bloqueo (aún me equivoco al intentar subir el volumen de mis canciones de Spotify) y el hecho de no contar con un jack de 3.5 mm para audífonos recordando que es un equipo de entrada.
Donde no tengo ninguna queja es en el peso. 184 gramos se sienten casi ligeros y combinan bien la estructura del teléfono. Más que aprobado en este apartado.
Desempeño
La performance del ZTE Blade V40s ha sido más que interesante.
Desde el vamos, se nota como un teléfono moderno, fluido y que puede destacar pese a tener como cerebro central al Unisoc T6189 que, valgan verdades, aún no puede competir directamente en desempeño gráfico y de potencia contra Qualcomm o Mediatek.
El equipo va bien el multitasking, con 6GB de RAM físico que pueden incrementarse a 11 con la RAM virtual. Debes recordar que es una opción que viene desactivada por defecto, pero que puedes aprobar para que, cuando lo necesites, te ayude en los momentos más fuertes del día sin sufrir parones.
La sensación también es cómoda gracias al ecosistema que lo gobierna: una capa llamada MyOS 12.0.4 basado en Android 12 con un parche de seguridad actualizado recientemente. Claro está, pediremos con prioridad una actualización a Android 13 ni bien sea posible.
En ningún momento mi experiencia se sintió anticuada como en otros equipos de la marca. ZTE ha hecho un buen trabajo con su personalización propia al sistema operativo, lo cual es de aplaudir. Incluso me agradó ver opciones como la pantalla siempre encendida dentro de sus posibilidades, permitiéndonos activarla de manera permanente o por ciertos lapsos luego de tocar la pantalla.
Incluso, esta vez el bloatware (las apps que ponen las operadoras en el equipo) fue menos intrusivo en el equipo que en ocasiones anteriores. Fáciles de desinstalar y el único rastro que queda es la pantalla al prender el equipo.
Jugando también nos fue decentemente. Pokémon Unite se jugaba en gráficos altos a más de 50 cuadros por segundo, mientras que Mobile Legends se sentía a gusto en el terminal. Pasados los 30 minutos de juego se sentía siento calentamiento en la parte trasera, pero nada preocupante.
Recordemos que es un equipo que llega con 128GB de almacenamiento interno, pero este puede ser extendido hasta 1TB con una tarjeta microSD externa.
La sensación es disfrutable concentrándose también en la pantalla. Los colores son muy bien apreciables y se resalta la resolución Full HD+ disponible. El brillo en exteriores es el adecuado, sin ser impresionante, pero sin quedarte totalmente a negras. La tasa de refresco es de 60 hercios, pero con la modificación de velocidad de animación en el sistema incluso sentirás que va más allá de este número.
Punto en contra: los altavoces. Solo cuenta con una bocina la cual es poco destacable. Hasta diría que está para cumplir.
Otro punto a mejorar es el de la batería. No la siento baja, pero si queremos darnos el lujo de tener funciones como la pantalla siempre encendida, nos despediremos de ella en menos de un día de actividad. Su cargador te lo energizará completamente en poco más de hora y media. Para tomar en cuenta.
Pasemos al rubro de las cámaras.
Contamos con una mezcla de un lente principal de 50 MP, con un bokeh 2 y un lente 5 MP macro.
En color, la cámara puede lucirse en luz natural, pero decae en detalles y opacidad proporcionalmente con la falta de ella.
El modo bokeh es correcto, aunque de vez en cuando se puede confundir tu contorno, especialmente el cabello, con el difuminado. De todas formas me gustó la mayoría de tomas selfie que realicé con este lente.
El modo noche es un poco lento, pero puede tomarte buenas capturas con paciencia. Eso sí, si hay mucho movimiento en la toma o luces muy fuertes, no tendrás grandes instantáneas.
¿Una gran deuda? No tener un lente gran angular que, a mi preferencia, debe tener mayor prioridad ante otros como el macro. Tampoco contamos con un telefoto, por lo que deberás confiarte del zoom mediante su software.
Por la parte frontal, el sensor de 8MP me ha dado buenas imágenes incluso de noche.
Por el lado del video, puede grabar en 720 y 1080p, pero solo hasta 30 cuadros por segundo. Rescato mucho su estabilizador digital, el cual recomiendo mucho utilizar al grabar.
¿Vale la pena el ZTE Blade V40s?
ZTE está arriesgándose más en la gama media para convencer a usuarios indecisos. Aunque no da un salto certero en procesador y cámaras, el ZTE Blade V40s sí lo hace en diseño y software, lo que le permite competir de iguales a ya posicionadas en el campo asequible como Redmi o Moto.
El precio con el que se oferta el equipo es de 839 soles en prepago, reduciendo a 799 soles en planes pospago de distintas operadoras. ¿La verdad? Estoy convencido de que es un buen equipo y que puede ser del agrado de muchos usuarios que quieren equilibrar el desempeño con la estética. Lo recomiendo.
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