Octubre de 2025 será la fecha límite para actualizar equipos. La transición afectará a cerca de 400 millones de computadoras incompatibles con Windows 11.
Microsoft ha lanzado una advertencia contundente durante el CES 2025. Aproximadamente 400 millones de usuarios deberán renovar sus computadoras antes de octubre de 2025, cuando Windows 10 llegue al final de su ciclo de vida después de una década de actualizaciones y soporte.
Yusuf Mehdi, director de marketing de consumo de Microsoft, ha confirmado en el blog de la compañía que a partir del 14 de octubre de 2025, los equipos con Windows 10 dejarán de recibir actualizaciones de seguridad y nuevas funciones, lo que podría exponer a los usuarios a vulnerabilidades críticas.
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La situación es particularmente grave considerando que cerca de la mitad de los 800-850 millones de PC que ejecutan Windows 10 no cumplen con los requisitos de hardware necesarios para actualizar a Windows 11.
Desafíos para "el año de Windows 11"
La transición no está exenta de desafíos. Sorprendentemente, en los últimos meses se ha registrado un incremento en la cuota de mercado de Windows 10 frente a Windows 11, una tendencia que preocupa a Microsoft. Esta resistencia al cambio podría generar un escenario crítico cuando llegue la fecha límite, con cientos de millones de usuarios perdiendo soporte simultáneamente.
Microsoft está aprovechando el impulso de la inteligencia artificial como incentivo para la actualización. Los nuevos PC con Windows 11 incluirán características como la tecla Copilot y capacidades mejoradas de IA, siendo hasta cinco veces más rápidos que los equipos Windows de cinco años de antigüedad.
Según datos de IDC citados por la compañía, el 80% de las empresas planean actualizar sus equipos antes de finales de 2025, mientras que el 70% de los consumidores lo harán en los próximos dos años.
La seguridad se presenta como el argumento más contundente para la actualización. Los nuevos PC con Windows 11 incorporan características de seguridad avanzadas, incluyendo el procesador de seguridad Pluton y protección contra ataques de firmware mediante PC Secured-core, todas activadas por defecto.
Para facilitar la transición, Microsoft está colaborando con fabricantes como Dell, HP, Lenovo, Acer, ASUS y Samsung para ofrecer una amplia gama de equipos a diferentes precios. Además, la empresa promete una solución integral para transferir archivos, temas, aplicaciones y configuraciones, asegurando una migración fluida y segura.
Aunque Microsoft anunció en octubre pasado una extensión de soporte de 12 meses por $30, la empresa está enfocando sus esfuerzos en promover la actualización de hardware. Esta situación plantea un desafío significativo para usuarios domésticos y empresariales que deberán planificar una inversión considerable en nuevos equipos.
La llegada del fin de soporte de Windows 10 marca un punto de inflexión en la historia de la computación personal, forzando una renovación masiva de equipos que podría tener importantes implicaciones económicas y ambientales.
Microsoft quiere que 2025 sea el año en que los usuarios prioricen la actualización de sus PCs por encima de otros dispositivos electrónicos, en una carrera contra el tiempo para mantener la seguridad y acceder a las nuevas capacidades de IA que promete Windows 11.
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