"Blood of my Blood" fue el nombre del nuevo capítulo de Game of Thrones que nos trajo de vuelta a un recordado personaje de la segunda temporada.
Después de que el mundo llorara la triste partida de Hodor, Game of Thrones presentó el sexto episodio de su sexta temporada "Blood of my Blood" que se enfoca en la llegada de Samwell, Gilly y el pequeño Sam a Colina Cuerno, así como la recuperación de Margaery por parte de un ejército lidetado por Jaime y Lord Tyrell, antes de que la joven reina llegue a cumplir el Paseo de la Expiación.
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Después de huir de los white walkers, lo cual supuso el noble sacrificio de Hodor, Meera y Bran siguen escapando pero los caminantes los encuentran, sin embargo son salvados por un misterioso jinete encapuchado. ¿Manosfrías? Es lo primero que se nos pasó por la cabeza.
Camino a Colina Cuerno, Samwell le comenta a Gilly que es mejor guardar las apariencias pues su padre es totalmente estricto y odia a los salvajes. Una vez que llegan, se encuentran con la hospitalidad de las amables madre y hermana de Sam, quienes adoran a Gilly y al pequeño bebé desde la primera impresión.
Una vez en la cena, Lord Tarly no se cree el cuento de que Sam y Gilly se conocieron en el Norte y descubre que es una salvaje. Decide dejar que la joven se quede con el pequeño, pero el aspirante a Gran Maestre deberá irse y no volver nunca más a Colina Cuerno. Sam lo piensa pero decide huir con Gilly, robando la ancestral espada familiar de acero valyrio de su padre.
En Braavos, la niña sin nombre Arya Stark sigue cumpliendo cabalmente su misión de asediar a Lady Crane con el fin de asesinarla por encargo de Jaqen H'ghar, y tras envenear su ron se encuentra con la actriz quien le da una breve charla sobre sus inicios como actriz ganándose la empatía de la joven Stark. La misma que se arrepiente y evita que tome el ron envenenado.
La aprendiz de H'ghar le revela la deslealtad de Arya y éste decide cumplir con su promesa y ordenar que la mate "pero sin que sufra". Para esto, Arya se anticipó y recuperó a "Aguja", la espada que Jon le regaló y que tenía guardada entre unas rocas, con el fin de defenderse si es necesario.
En King's Landing, Jaime Lannister y Lord Tyrell unen a su ejército para hacer frente a los gorriones, con el fin de evitar que Margaery sea sometida al Paseo de la Expiación frente a todo el pueblo. Pero el Septón Supremo dice que no sería necesario usar la fuerza, pues ya contaba con el aval del Rey. Fue así como Tommen apareció totalmente convencido por Margaery de servir a los dioses, le da su apoyo al Gorrión Supremo y le quita su título de Comandante de la Guardia Real a Jaime, enviándolo en una misión a Aguasdulces para tratar con el Pez Negro.
Más allá del Muro, el jinete misterioso revela su identidad, y era nada menos que el tío Benjen, a quien se le creía muerto desde la segunda temporada. El guardia de la noche reveló que cayó abatido por los White Walkers, pero los Hijos del Bosque evitaron que sea transformado y lo trajeron a la vida con un trozo de vidriagón, así como crearon al Night King.
Más allá del Mar Angosto, en camino a Mereen, Daenerys confiesa que su única misión es recuperar lo que le pertenece. Por ello, se distancia del ejército dothraki para reaparecer montando sobre el imponente Drogon, su rebelde dragón que vuelve a su servicio, y con el cual se gana el reconocimiento y la alta fidelidad de los dothraki a quienes hace jurar que la ayudarán a cruzar el Mar Angosto para conquistar Westeros y los Siete Reinos.
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