La reliquia fue entregada al mandatario en 1986. Los cusqueños indican que la pieza fue cedida sin que las autoridades de la época hicieran consulta popular alguna.
Hace veinticinco años el entonces alcalde de la localidad cusqueña de Canas tuvo la peregrina idea de obsequiarle al mandatario del Perú una reliquia histórica. La pistola de Túpac Amarú II fue entregada en 1986 a un joven Alán García.
Desde entonces, los ciudadanos del Cusco aguardan la esperanza de que la histórica arma sea devuelta. Un panorama alentador se erige este año pues, como lo indica un medio local, los trámites de la devolución han avanzado a tal punto que la devolución de la pistola se produciría este año.
Por su parte, "los habitantes caneños esperan con ansias ese día (en que se devuelva la pieza), se trata de reinvindicar a un pueblo que vio nacer a un héroe de verdad", indicó Huber Esquivel, burgomaestre de Langui al diario Correo.
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