¿Alguna vez has dicho o hecho algo que te ha traído problemas? Así como numerosas figuras públicas, muchos de nosotros hemos actuado o hablado sin pensar en las posibles consecuencias. “La persona impulsiva suele no controlar su ira y realiza actos violentos sin pensar. En algunos casos reaccionando de forma exagerada a la situación”, explica la psicóloga Maribel Briceño.
Falta de habilidades sociales. “El impulso muestra la incapacidad del sujeto de adaptarse a la situación. El ataque de furia daña al impulsivo y a los otros; asimismo, es muestra de rigidez y de falta de herramientas para afrontar situaciones estresantes”, añade Briceño.
Ella nos ofrece 11 consejos para controlar nuestros impulsos. Puede revisarlos en la galería que le ofrecemos.