7 equivocaciones por las que el gimnasio no te sirve
Creer en cambios mágicos. Los resultados no se verán de la noche a la mañana, pensar lo contrario lo único que hace es generar frustración y hacer que quieras abandonar el ejercicio. “El cuerpo necesita tiempo para adaptar los estímulos que le damos con el entrenamiento, y para que se produzcan mejoras”, dice el entrenador personal Ángel Merchán. |
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Entrenar menos de dos días a la semana. Al contrario, debe haber constancia y regularidad en el ejercicio. La entrenadora de fitness Beatriz Solís recomienda 30 minutos 3 veces por semana, a fin de crear un hábito. |
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Centrarme solo en los abdominales. El vientre plano no se logra por el hecho de extremar el número de abdominales. “Afinar el abdomen depende fundamentalmente de la pérdida de grasa, y para ello hay que realizar un entrenamiento enfocado al gasto calórico y combinarlo con una alimentación adecuada que genere un cierto déficit calórico, es decir, gastar más calorías de las que ingerimos”, afirma el entrenador personal Ángel Merchán. |
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Comer lo que dice el entrenador personal. Lo correcto es acudir al experto en nutrición para tener una dieta equilibrada y variada según las necesidades particulares. Quizá haya que tener precaución antes de decidir por consumir productos para quemar grasas, eliminar líquidos o aumentar masa muscular, porque podrían comprometer órganos internos. |
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Hacer a un lado las pesas. Si el objetivo es perder peso, no todo es entrenamiento cardiovascular, también es necesaria una alimentación adecuada y un entrenamiento de fuerza. “Hacer solo ejercicio aeróbico (cinta, correr, caminar…) no nos ayuda a elevar el metabolismo, que es el motor quema grasas del cuerpo. Un entrenamiento completo de fuerza y aeróbico es lo que nos va a permitir una figura armoniosa”, comenta la entrenadora de fitness Beatriz Solís. |
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No realizar estiramientos. A la larga esto previene probables lesiones, porque luego del ejercicio ayudan a aliviar la tensión muscular, mejoran la movilidad y permiten que la musculatura se regenere más rápidamente. |
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Practicar la misma rutina de entrenamiento. Cada cuatro o seis semanas como máximo la rutina de ejercicios debe variar, porque de lo contrario el cuerpo se adapta y deja de provocar mejoras. “El cuerpo necesita detenerse para poder asimilar el entrenamiento. Si no reposamos una o dos veces en semana, corremos el riesgo de sobreentrenarnos, y conseguir lo contrario a lo que buscamos: empeorar nuestra condición física”, sostiene el entrenador personal Ángel Merchán. |
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Cuando tomamos la decisión de querer bajar esos kilos demás, es común que de forma entusiasta algunos se inscriban al gimnasio. El primer error es creer que los resultados vendrán de un día para otro, y cuando no es así se desiste del entrenamiento.
Existen otros errores que también perjudican nuestro objetivo de quemar grasas. Por ejemplo, es equivocado pensar que solo haciendo abdominales vamos a lograr un vientre plano.
“Afinar el abdomen depende fundamentalmente de la pérdida de grasa, y para ello hay que realizar un entrenamiento enfocado al gasto calórico y combinarlo con una alimentación adecuada que genere un cierto déficit calórico, es decir, gastar más calorías de las que ingerimos”, dijo el entrenador personal Ángel Merchán a Elpais.com.
En la galería de fotos que aparece arriba de la nota, están otros errores de gimnasio que advierten especialistas en entrenamiento personal y fitness.