En el marco del Día Nacional de la Vacunación, el doctor Elmer Huerta, asesor médico de RPP, hace un llamado a reflexionar sobre la importancia de inmunizar a la población y alerta sobre los retos que enfrenta el país para lograrlo.
Cada 29 de mayo, el Perú conmemora el Día Nacional de la Vacunación, una fecha que tiene como propósito reforzar la conciencia colectiva sobre la importancia de la inmunización. Aunque pueda parecer sorprendente que en pleno 2025 aún debamos insistir en los beneficios de las vacunas, lo cierto es que este recordatorio es más necesario que nunca.
El doctor Elmer Huerta, asesor médico de RPP, reflexiona que la vacunación debería ser una práctica tan habitual como alimentarse de manera saludable o realizar actividad física. Sin embargo, advierte que aún estamos lejos de asumirla como un hábito automático en nuestra vida cotidiana. Este día, por tanto, no solo busca informar, sino también promover una cultura de responsabilidad individual y colectiva frente a la salud pública.
Lamentablemente, en las últimas dos décadas se ha producido un resurgimiento de dudas y desinformación respecto a la vacunación. Factores religiosos, desconfianza científica y argumentos sobre la libertad individual han alimentado movimientos antivacunas en todo el mundo, intensificados por la controversia durante la pandemia de COVID-19. El Dr. Huerta dice que Perú no ha sido ajeno a esta tendencia: las tasas de vacunación infantil han descendido, y en el caso del sarampión, apenas se alcanza un 85 % de cobertura, cuando lo mínimo necesario para evitar brotes es 95 %.
Esta situación es especialmente crítica en las zonas altoandinas y amazónicas del país, donde el acceso a la vacunación es limitado. Aunque los equipos de salud hacen esfuerzos por llegar a comunidades alejadas, estas acciones requieren respaldo político y financiero sostenido. Según Huerta, el presupuesto nacional destinado a vacunación se ha reducido este año, pasando de 744 millones de soles en 2024 a 595 millones en 2025. Esta disminución preocupa profundamente en un contexto donde se necesitan más recursos, no menos.
Por ello, en este Día Nacional de la Vacunación, es fundamental hacer un llamado tanto a la ciudadanía como a las autoridades. A los padres, para que completen el esquema de vacunación de sus hijos. A los gobiernos, especialmente al Ministerio de Economía y Finanzas, para que prioricen y refuercen el financiamiento de los programas de inmunización. Y al Ministerio de Salud, para que mantenga y fortalezca su compromiso con estas políticas de prevención.
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