Las enfermedades parasitarias son crónicas, ello significa que un niño puede ingerir huevos de parásitos y recién enfermar de adulto o luego de muchos años.
Muchas calles y parques suelen estar contaminados con heces de perros, lo que constituye un riesgo para la salud de las personas ya que estos desechos contienen parásitos, virus y bacterias que pueden provocar enfermedades gastrointestinales, oftalmológicas, quistes e incluso aborto en gestantes.
Según los expertos del Ministerio de Salud (Minsa), la contaminación con heces de perros puede ser de mayor o menor grado, pero el riesgo para la salud es alto porque los huevos de los parásitos flotan en el medio ambiente y pueden ser absorbidas por una persona al respirar.
Entre estos parásitos figura el toxocaro que ataca el globo ocular y genera estrabismo en los niños, pérdida gradual de la vista e incluso ceguera; el ancylostoma giarda ataca el aparato gastrointestinal; el toxoplasmosis puede provocar problemas en el globo ocular y también aborto en madres gestantes o retardo mental en el bebé. Además existen otros parásitos nocivos para el organismo humano.
Información útil
- Los canes se lamen el ano y allí hay parásitos. Por ello los niños no deben besar a los perros ni deben ser lamidos por estos.
- Las enfermedades parasitarias son crónicas, ello significa que un niño puede ingerir huevos de parásitos y recién enfermar de adulto o luego de muchos años.
- Además de transmitirnos enfermedades parasitarias los perros pueden provocar enfermedades virales (como rabia), y bacteriales (como leptospirosis que provoca problemas renales y también aborto en gestantes).
- Todos los alimentos de los canes deben ser cocidos ya que al comer vísceras o carnes crudas desarrollan un parásito llamado hidatidosis, que al ingresar al organismo humano forma un quiste o bolsa de tenias en el hígado.
- Para cuidar los parques es importante que al pasear con un perro se tenga a mano una bolsa plástica para depositar las heces.
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