El gerente general del BCR señaló que se debe pensar en un arancel razonable para el arroz, menor al 20%, para no afectar a los consumidores ni a los productores.
El Banco Central de Reserva (BCR) cuestionó la propuesta de la Asociación Peruana de Productores de Arroz (Apear) de aplicar un arancel fijo de más de 46% a la importación de este cereal, a fin de proteger a los productores nacionales del ingreso de arroz importado barato.
“Con sobretasas y todo, en el mejor momento el arrocero nunca recibió más de 20%, pero fue en un caso extremo con la sobretasa, entonces pensar en un 46% (de arancel) es mucho, 20% fue lo máximo, por lo tanto tiene que ser bastante más bajo”, afirmó el gerente general del BCR, Renzo Rossini, tras participar en un foro organizado por la Asociación Peruana de Finanzas (APEF).
A favor del cambio. No obstante, consideró adecuado retirar al arroz y al maíz amarillo duro del sistema de franja de precios, tal como anunció el Ejecutivo, que usaba sobretasas para fijar límites máximos y mínimos en el precio de estos productos, y usar ahora un arancel fijo “ad valorem” (de acuerdo al valor).
Si embargo, señaló que se tenía que evaluar de forma adecuada cuál debería ser la tasa del arancel para no afectar al consumidor ni al productor.
“Porque estamos hablando del consumidor, en la dieta del peruano nunca falta el arroz, entonces no se le puede levantar el precio 50% de la noche a la mañana, nadie lo va a aceptar, hay que pensar en el consumidor”, afirmó.
Pide arancel razonable. Rossini explicó que con la eliminación de la franja de precios y la sobretasa, se deja de lado un esquema bastante complejo que no permitía estabilizar necesariamente un precio para el agricultor.
“Ahora hay que pensar en un arancel razonable, no tengo una cifra no soy especialista, pero hay que pensar en un balance entre el consumidor y en nuestros productores, pues también hay que estabilizarlos y saber que no pueden estar sujetos a unos vaivenes muy fuertes en los precios”, añadió.
“Por eso el acuerdo me parece bueno, eliminar un sistema complejo, que no logra ya los objetivos e inclusive nos creaba problemas internacionales”, aseveró.
Podemos fallar hacia arriba. De otro lado, respecto a la proyección de crecimiento del BCR para la economía peruana en el 2018, Rossini confirmó que se mantiene en 4.2%, pero con un sesgo al alza.
“La proyección nuestra es de 4.2% y nuestra proyección de inversión privada es cerca de 6%, y lo que se ha observado en las recuperaciones es que esa inversión puede subir más, por eso hay un sesgo a que si fallamos, podemos fallar hacia arriba”, sentenció.
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