En 1997, fue el primer artista en emitir un bono respaldado por las futuras ganancias de sus discos publicados antes de 1990. Obtuvo US$55 millones.
El mundo de la música, la moda y el arte está de luto hoy tras el anuncio del fallecimiento de David Bowie. Sin embargo, aunque el artista inglés es reconocido por su fuerza innovadora en estos ámbitos, también contribuyó a que se genere una nueva categoría de inversiones en los mercados financieros.
La agencia Bloomberg recuerda hoy que Bowie fue el primero en crear instrumentos de inversión financiera respaldados por las regalías que recibiría en el futuro por su música.
En 1997, se vendieron US$55 millones en 'Bonos Bowie' (Bowie Bonds), cuyos rendimientos estaban atados a las ganancias que generaran en el futuro sus discos lanzados antes de 1990, que incluían himnos como "Space Oddity" o "Changes".
En ese momento, los 'Bonos Bowie' ofrecían un tipo de interés de 7.9% a diez años.
Este tipo de instrumentos, generalizados después del éxito de los Bonos Bowie, permiten que los artistas levanten capital sin tener que vender por completo sus obras o esperar años a que los pagos de regalías vayan llegando, como explica Bloomberg.
Pero la emisión de los Bonos Bowie no solo abrió la puerta de los mercados financieros a otros artistas, como Rod Stewart y Iron Maiden, sino que también ha permitido que otros negocios emitan instrumentos de inversión basados en retornos futuros poco tradicionales.
"Los bonos de Bowie rompieron tantas barreras como su música", comenta Rob Ford, de TwentyFour Asset Management, a Bloomber. "No solo fueron imitados por muchos otros artistas, sino que sentaron las bases para nuevos instrumentos respaldados por un nuevo rango de activos".