Al margen de Howard K. Stern, también sido declarada responsable la ex siquiatra de la conejita de Playboy, Khristine Eroshevich.
Un jurado de la Corte Superior de Los Ángeles (California) declaró hoy culpables al ex novio y a la ex psiquiatra de la fallecida Anna Nicole Smith por inducir a la ex modelo de Playboy a su adicción a los fármacos, informaron las autoridades locales.
La ex pareja de Smith, Howard K. Stern, y su ex psiquiatra, Khristine Eroshevich, no corrieron la misma suerte que el otro acusado, Sandeep Kapoor, el médico personal de la conocida modelo de Playboy, quien fue absuelto de los seis cargos que se le imputaban.
El doctor Kapoor, al igual que Stern y Eroshevich, estaba acusado de suministrar de forma ilegal fármacos con prescripción a Smith, fallecida de sobredosis en febrero de 2007 a los 39 años.
A Stern se le encontró culpable de proporcionar falsos nombres y de cometer fraude a la hora de obtener las prescripciones médicas, mientras que a Eroshevich se le imputa el haberle recetado el calmante Vicodin de forma ilegal.
Los cargos son por conspiración, excesiva prescripción de opiáceos y sedantes a un adicto y fraude al obtener determinados medicamentos.
El jurado, compuesto por seis hombres y seis mujeres, alcanzó un veredicto después de escuchar durante dos meses los testimonios de los acusados en el caso.
Debían determinar si los acusados intentaban minimizar el daño emocional y físico de Smith o si estaban alimentando su adicción a los fármacos.
Los tres no estaban acusados de la muerte de la ex modelo.
Durante las audiencias previas se supo que Smith pasó sus últimos días en estado de semiinconsciencia, incapaz de andar y alimentándose a través de un biberón, antes de que fuera trasladada a un hospital de Florida donde se certificó su muerte como un accidente por abuso de sedantes.
El fallecimiento fue seguido por una investigación que durante más de tres años ha rastreado las sustancias encontradas en el cuerpo de Smith.
La muerte de Smith fue el último capítulo de una vida tumultuosa que incluyó un matrimonio con el multimillonario J. Howard Marshall y sus batallas legales en defensa de la herencia que le dejó este octogenario magnate del petróleo.
Tras su desaparición los juicios continuaron para determinar el lugar en el que la explosiva heredera sería enterrada así como la paternidad y custodia de su única hija, Danielynn, ambas ahora en manos de Larry Birkhead, padre de la niña.
EFE
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