Un día como hoy, pero en 1986, Héctor Lavoe Héctor Lavoe ofreció el primero de los seis conciertos en el escenario del estelar de la recordada Feria del Hogar.
Si se habla de salsa en el Perú o en el mundo, uno de los mayores referentes es, sin duda, Héctor Lavoe. En cada calle del Callao, de Lima o de cualquier barrio, su nombre quedó grabado en la memoria de miles de peruanos, especialmente de quienes tuvieron la suerte de verlo en nuestro país durante la recordada Feria del Hogar.
'El cantante de los cantantes' ofreció seis presentaciones en Perú gracias a las gestiones del empresario Jorge Fernández, quien en 1986 logró contactar al mánager del artista. Su primera presentación tuvo lugar el 5 de agosto de ese mismo año y la última, el 10 de agosto.
De esas seis noches, hay una en particular que fue rescatada y que circula en YouTube; los salseros la consideran uno de los registros más fascinantes de todas las presentaciones que ofreció el 'Jibarito de Ponce' a lo largo de casi 30 años de trayectoria. En ella aparece con su clásica polera turquesa, pantalón blanco y lentes oscuros.
Todos los shows estaban programados para las ocho de la noche. El primer día, alrededor de la una de la tarde, ya había mil personas haciendo cola; tres horas después, el número ascendía a diez mil.
Los periódicos y radios informaban sobre su presentación en la Feria del Hogar, aunque muchos ponían énfasis en su conocida impuntualidad al subir al escenario. Sin embargo, Lavoe fue puntalísimo en todas sus presentaciones.
"Hacía años que no me sucedía conmigo lo que ha pasado aquí. Cuando yo me fui a Panamá me aceptaron bien chévere. Después se trancó esa vena y no he ido en años. Pero vine aquí y me ha dado un reconocimiento. Yo creía que ya no existía tanta fuerza en mí. Pero aquí me han revivido. Ha sido la inyección fantástica. Perú, me inyectaste”, dijo Lavoe a Hugo Abele, músico y amigo personal del artista en una entrevista.
El legado de Héctor Lavoe en Perú: más que música, un estilo de vida
El legado de salsa que dejó Héctor Lavoe durante aquellas seis noches fue suficiente para que la comunidad salsera del Perú adoptara este género musical como un verdadero estilo de vida. Sus canciones, letras, mensajes, música, monumentos, tributos, camisetas y todas las expresiones de amor de sus fanáticos hacia el intérprete siguen vivas.
En 1993, cuando 'El cantante de los cantantes' falleció, la tristeza embargó a todo el movimiento salsero en el país. Muchos salieron a las calles a bailar, a tocar su repertorio e incluso a vestirse como él. Con botellas de cerveza en mano y coreando cada tema, el público peruano despidió al 'Flaco de Oro', el hijo predilecto de Ponce.
Callao rinde homenaje eterno a Héctor Lavoe
En 2016, con motivo del aniversario del Callao, se desveló un monumento de cuerpo completo en honor a Héctor Lavoe. Frente a la iglesia Matriz del barrio Castillo, muchos de sus fanáticos se tomaron fotografías junto a la imagen del salsero.
Según Gerardo García García, líder de Asocosalsa Perú, no existe una estatua similar en ningún otro país, lo que convierte al primer puerto en un lugar único.
"Este es un presente no solo para los peruanos, o los chalacos que somos nosotros, sino también para el mundo entero. Sabemos que en Puerto Rico y en otros países se escucha la música de Lavoe y que lo quieren tanto como nosotros. Disfruten de esta hermosa estructura, todos están bienvenidos. Que Héctor viva por siempre", expresó en ese entonces.
Esta es la segunda imagen de Héctor que se puede apreciar en el Callao. La primera es un busto ubicado frente al obelisco, en la zona de Santa Marina Norte, inaugurado hace años.