El sumo pontífice se ´burló´ del fanático xeneize haciéndole una señal en referencia al 1-0 que le propinó San Lorenzo al cuadro de Riquelme.
En uno de sus tradicionales recorridos por el Vaticano, el papa Francisco bromeó con un hincha argentino cuando le dijo que era fanático de Boca Juniors.
En ese momento, el sumo pontífice, reconocido admirador de San Lorenzo, respondió con sonrisas y mostrándole un dedo de su mano, que significaba el último marcador (1-0) entre San Lorenzo y Boca Juniors de hace unas semanas atrás en el fútbol argentino.
Antes de encontrarse con el hincha de Boca, el papa saludó a niños que vestían la ‘Albiceleste’ y luego continuó su recorrido.
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