EEUU alerta sobre bombas en pasta de dientes en vuelos hacia Rusia

El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) envió este miercoles una alerta a las aerolíneas que vuelan a Rusia y especialmente a Sochi, donde se celebran los Juegos Olímpicos de Invierno, que sean especialmente cuidadosos con posibles explosivos escondidos en tubos de patas de diente.

Según la cadena NBC, los funcionarios estadounidenses limitan su advertencia a vuelos directos desde otros países a Rusia, no los que parten de Estados Unidos y en ningún caso los vuelos hacia el interior de este país.

"Extremando la precaución, DHS comparte regularmente información con socios nacionales e internacionales, incluidos aquellos relacionados con las Olimpiadas de Sochi", indicó esta institución en su comunicado.

Pese a la alerta, reconocen que no "tienen constancia de ninguna amenaza específica por el momento" y se basa, según las fuentes consultadas por NBC, en informaciones "muy nuevas".

Las aerolíneas con vuelos directos a Rusia han sido ya notificadas y depende de ellas y de las autoridades de los países competentes el cambiar las normas de equipaje de mano.

La seguridad se está extremando a pocos días de que comiencen los Juegos Olímpicos de Invierno de Sochi, una ciudad cercana a la conflictiva región rusa del Cáucaso Norte que se ha blindado para evitar atentados durante el evento deportivo.

El pasado mes, las autoridades rusas pidieron a la aerolíneas que no permitan líquidos en equipajes en vuelos con destino a Sochi para extremar la precaución.

El Departamento de Estado emitió el mes pasado una alerta de viaje en la que recomienda a los estadounidenses que viajen a Sochi "cuidar de su seguridad personal en todo momento y permanecer alerta y ser prudentes cuando usen cualquier tipo de transporte público".

Más de 52.000 agentes de la policías y efectivos del Ministerio de Interior ruso, así como 23.000 miembros del Ministerio para Situaciones de Emergencia, se encargarán de la seguridad de los Juegos, para lo cual se utilizará a un nivel sin precedentes la vigilancia electrónica, con cámaras y satélites.

EFE