Cerca de 50 manifestantes, con carteles en defensa de Cuba, ocuparon la sala del Museo del Saber, donde se iba a presentar la bloguera disidente.
Las manifestaciones con que militantes de izquierda recibieron hoy en Brasil a la cubana Yoani Sánchez, autora del blog "Generación Y", impidieron la realización del primer acto en que la disidente cubana participaría en el país, informaron sus organizadores.
La exhibición en la ciudad brasileña de Feira de Santana del documental "Conexión Cuba-Honduras", que incluye una entrevista con Sánchez, fue suspendida luego de que militantes de diferentes partidos de izquierda sabotearan el acto.
El documental es una producción cinematográfica sobre las restricciones a la libertad de expresión en diferentes países dirigido por Dado Galvao, el brasileño que organizó varias campañas en Brasil para pedir que Sánchez fuera autorizada a salir de su país y que organizó parte de la agenda de la disidente en el país.
Cerca de 50 manifestantes, con carteles en defensa de Cuba, ocuparon la sala del Museo del Saber en que el documental sería exhibido, que tiene capacidad para unas 200 personas, y, sin agresiones físicas, acallaron con sus gritos cualquier pronunciamiento, según el fotógrafo enviado por Efe para cubrir el evento.
Los manifestantes, a los gritos de "traidora" y "viva la revolución", impidieron que la cubana, una de las principales voces de la disidencia en su país y que finalmente fue autorizada a salir de Cuba tras cinco años de intentos, fuera escuchada, y obligaron a los organizadores a anunciar la suspensión de la exhibición.
Los militantes portaban banderas de formaciones como el oficialista Partido de los Trabajadores (PT) y el Partido Comunista do Brasil (PCdoB).
Además, no atendieron ni las peticiones de tregua del senador Eduardo Suplicy, un dirigente del PT que también organizó campañas para defender la salida de Sánchez de Cuba.
Pese a que los manifestantes aceptaron mantener silencio desde que también fuesen autorizados a pronunciarse, Sánchez sólo consiguió pronunciar unas breves palabras antes de ser interrumpida nuevamente por los gritos.
Sánchez llegó en la madrugada al aeropuerto de Recife, en donde hizo escala antes de dirigirse a Salvador y continuar por tierra hasta Feira de Santana, una ciudad de 557.00 habitantes en el interior del estado de Bahía.
Tanto en Recife como en Salvador, puñados de militantes comunistas se manifestaron contra su visita a Brasil mostrando fotografías de Fidel Castro y del Ché Guevara, así como carteles en los que la presentaban como "mercenaria" y "agente de la CIA".
Antes de las manifestaciones en Feira de Santana, la disidente afirmó en su blog que le gustó ser recibida con protestas en Brasil porque le permitió decir que soñaba con que algún día en su "país la gente se pudiera expresar públicamente así en contra de algo, sin represalias".
Fue "un verdadero regalo de pluralidad, para mí que llego de una isla a la que han intentado pintar con el monocromático color de la unanimidad", aseguró.
EFE
Comparte esta noticia