Los obreros recibieron este sábado recipientes con petróleo para abastecer la maquinaria pesada con la que cuentan abajo y estar listos para intervenir en su rescate.
Los 33 trabajadores atrapados en una mina del norte de Chile recibieron este sábado recipientes con petróleo para abastecer la maquinaria pesada con la que cuentan abajo y estar listos para intervenir en su rescate, informó el personal a cargo de la operación.
Los socorristas aprovecharon un ducto de 30 cm de diámetro que se terminó el viernes y que llega a un taller al que tienen acceso los mineros, a 630 m de profundidad, para enviarles recipientes con combustible para abastecer a las máquinas que están en el fondo del yacimiento, dijo el ingeniero a cargo de las operaciones, André Sougarret.
Sougarret explicó que realizaron tres envíos de unos 200 litros cada uno con el objetivo de que los mineros tengan combustible para movilizar maquinaria con que cuentan en el fondo de la mina y que ayuden en las tareas de remover escombros, prevista para una fase posterior del operativo de rescate.
Culminado el abastecimiento, la perforadora T-130 -que lleva adelante el denominado "plan B"- podrá reiniciar la fase final de su tarea, que consiste en ampliar el ducto hasta los 70 cm de diámetro, por donde podrían ser rescatados uno a uno los mineros a través de una cápsula que será elevada por una grúa.
Los 33 mineros permanecen atrapados desde el 5 de agosto pasado a 700 m de profundidad dentro de la mina San José, ubicada 800 km al norte de Santiago, en medio del desierto de Atacama.
AFP
Los socorristas aprovecharon un ducto de 30 cm de diámetro que se terminó el viernes y que llega a un taller al que tienen acceso los mineros, a 630 m de profundidad, para enviarles recipientes con combustible para abastecer a las máquinas que están en el fondo del yacimiento, dijo el ingeniero a cargo de las operaciones, André Sougarret.
Sougarret explicó que realizaron tres envíos de unos 200 litros cada uno con el objetivo de que los mineros tengan combustible para movilizar maquinaria con que cuentan en el fondo de la mina y que ayuden en las tareas de remover escombros, prevista para una fase posterior del operativo de rescate.
Culminado el abastecimiento, la perforadora T-130 -que lleva adelante el denominado "plan B"- podrá reiniciar la fase final de su tarea, que consiste en ampliar el ducto hasta los 70 cm de diámetro, por donde podrían ser rescatados uno a uno los mineros a través de una cápsula que será elevada por una grúa.
Los 33 mineros permanecen atrapados desde el 5 de agosto pasado a 700 m de profundidad dentro de la mina San José, ubicada 800 km al norte de Santiago, en medio del desierto de Atacama.
AFP
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