La decisión del ente regulador puede facilitar la importación de inmunizantes como la vacuna rusa Sputnik V y el antídoto de la farmacéutica estadounidense Moderna, que ya han publicado estudios de la fase III, pero fuera de Brasil.
La Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa) modificó las reglas para autorizar el uso en emergencia de vacunas en Brasil, medida que favorecerá un acceso "más rápido" de nuevos inmunizantes en el país.
La decisión del ente regulador puede facilitar la importación de inmunizantes como la vacuna rusa Sputnik V y el antídoto de la farmacéutica estadounidense Moderna, que ya han publicado estudios de la fase III pero fuera de Brasil.
De acuerdo con Anvisa, el estudio de la fase III de las pruebas no tendrá que hacerse obligatoriamente en Brasil, sino que debería ser "preferiblemente" realizado en el país.
El anuncio del ente regulador llega un día después de que la revista científica The Lancet publicara un análisis provisional de los datos de la última fase de las pruebas de la vacuna rusa Sputnik V, que sugiere una eficacia del 91,6 % con dos dosis, algo que Anvisa calificó la víspera como "buena noticia".
La decisión de Anvisa deja prácticamente abiertas las puertas al antídoto ruso, cuyo uso en carácter de emergencia podría ser aprobado en los próximos días por el regulador.
La vacuna rusa fue desarrollada por el Centro Nacional Gamaleya y será producida en el gigante suramericano por el laboratorio Uniao Química, que ya había solicitado autorización para su uso en carácter de emergencia en Brasil, pero Anvisa la había negado por no contar con estudios de la fase III en el país.
Dos vacunas de emergencia
Uniao Química pretende fabricar en Brasil hasta ocho millones de dosis mensuales del antídoto que ya fue autorizado por casi una veintena de países, entre los cuales varios latinoamericanos como Argentina, Bolivia, México, Paraguay y Venezuela.
La oferta de la vacuna rusa en Brasil es parte de un proyecto que involucra al Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF), a Uniao Química y al Instituto de Tecnología de Paraná, estado del sur de Brasil que hace algunos meses firmó un acuerdo con las autoridades rusas para experimentar el inmunizante y producirlo en el país.
Actualmente solo dos vacunas se están utilizando con carácter de emergencia en Brasil, la Coronavac -la vacuna desarrollada conjuntamente por los laboratorios Sinovac (China) y Butantan (Brasil)- y el inmunizante desarrollado por el laboratorio anglo-suizo AstraZeneca y la Universidad de Oxford, que será producido en Brasil por la Fundación Oswaldo Cruz,(Fiocruz), el mayor centro de investigación médica de Latinoamérica.
Brasil, uno de los países más azotados del mundo por la pandemia, superó este miércoles las 227 000 muertes y acumula más de 9,3 millones de casos de COVID-19.
(Información de EFE)
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