Para el mandatario boliviano, el retiro del embajador peruano de La Paz constituye una ´chacota´.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, aseguró hoy que su país "jamás intentó romper relaciones" con Perú, al contrario de lo que, a su juicio, intentó el Gobierno de Lima al llamar dos veces a consultas a su embajador Fernando Rojas.
"Bolivia, especialmente con los países de Sudamérica, jamás va a romper relaciones, pero Perú intentó romper relaciones", insistió hoy Morales en una rueda de prensa en el Palacio de Gobierno de La Paz.
"Se llevaron a su embajador, retornó su embajador. Otra vez lo llamaron, otra vez retorna a Bolivia, parece una chacota (burla). Nosotros decidimos que no vamos a retirar a nuestro embajador", dijo en referencia a las dos veces en que Rojas fue llamado a consultas a Lima.
El embajador peruano regresó a La Paz el pasado 31 de julio después de que los cancilleres David Choquehuanca, de Bolivia, y José Antonio García Belaunde, de Perú, acordaran en una reunión rebajar la tensión existente entre ambos países. Relaciones Perú - Bolivia
Rojas fue llamado por segunda vez a consultas a mediados de junio en señal de protesta ante Morales por responsabilizar a su homólogo de Perú, Alan García, de la represión a las protestas indígenas de la región amazónica peruana de Bagua, que causaron 34 muertos, 24 de ellos policías y el resto civiles.
A su vez, el Gobierno de Lima acusó al presidente Morales de instigar la violencia producida en esa región.
Hoy, el mandatario boliviano dijo que hay "ciertas dificultades" en la relación con Perú, pero reiteró que solo mejorarán cuando el Gobierno limeño "respete sus normas internas" y los tratados de refugio político.
El gobernante aludió a la decisión peruana de asilar a tres ex ministros del segundo gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada (2002-2003) acusados de genocidio por su presunta responsabilidad en la matanza de más de 60 personas durante los disturbios del 2003.
"Desde el momento en que están imputados los ministros de Sánchez de Lozada por delitos de lesa humanidad, ellos no podían recibir ningún asilo político bajo los tratados internacionales y bajo las normas de la república del Perú", insistió Morales.
El mandatario boliviano dijo que es necesario construir "confianza" entre los gobiernos y presidentes.
Ratificó, además, su propuesta en el sentido de que las diferencias de ambos países, por ejemplo en la Comunidad Andina, se pueden resolver si se llama a referendos regionales para preguntar a los pueblos sobre políticas sociales y económicas. EFE
"Bolivia, especialmente con los países de Sudamérica, jamás va a romper relaciones, pero Perú intentó romper relaciones", insistió hoy Morales en una rueda de prensa en el Palacio de Gobierno de La Paz.
"Se llevaron a su embajador, retornó su embajador. Otra vez lo llamaron, otra vez retorna a Bolivia, parece una chacota (burla). Nosotros decidimos que no vamos a retirar a nuestro embajador", dijo en referencia a las dos veces en que Rojas fue llamado a consultas a Lima.
El embajador peruano regresó a La Paz el pasado 31 de julio después de que los cancilleres David Choquehuanca, de Bolivia, y José Antonio García Belaunde, de Perú, acordaran en una reunión rebajar la tensión existente entre ambos países. Relaciones Perú - Bolivia
Rojas fue llamado por segunda vez a consultas a mediados de junio en señal de protesta ante Morales por responsabilizar a su homólogo de Perú, Alan García, de la represión a las protestas indígenas de la región amazónica peruana de Bagua, que causaron 34 muertos, 24 de ellos policías y el resto civiles.
A su vez, el Gobierno de Lima acusó al presidente Morales de instigar la violencia producida en esa región.
Hoy, el mandatario boliviano dijo que hay "ciertas dificultades" en la relación con Perú, pero reiteró que solo mejorarán cuando el Gobierno limeño "respete sus normas internas" y los tratados de refugio político.
El gobernante aludió a la decisión peruana de asilar a tres ex ministros del segundo gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada (2002-2003) acusados de genocidio por su presunta responsabilidad en la matanza de más de 60 personas durante los disturbios del 2003.
"Desde el momento en que están imputados los ministros de Sánchez de Lozada por delitos de lesa humanidad, ellos no podían recibir ningún asilo político bajo los tratados internacionales y bajo las normas de la república del Perú", insistió Morales.
El mandatario boliviano dijo que es necesario construir "confianza" entre los gobiernos y presidentes.
Ratificó, además, su propuesta en el sentido de que las diferencias de ambos países, por ejemplo en la Comunidad Andina, se pueden resolver si se llama a referendos regionales para preguntar a los pueblos sobre políticas sociales y económicas. EFE
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