Junto a los cadáveres, un hacha y barriles, con combustible donde presuntamente un grupo de la delincuencia organizada "cocinaba" a sus rivales.
Tres cuerpos humanos descuartizados y restos de al parecer otros más fueron hallados en un rancho del norteño estado mexicano de Nuevo León, supuestamente usado por narcotraficantes para "cocinar" a sus rivales, informaron hoy autoridades.
Fuentes de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI) reportaron que una llamada anónima les alertó sobre una persona calcinada en un rancho abandonado, localizado en una brecha que conduce a la Comunidad Chihuahuitas del municipio de Cadereyta.
A ese lugar llegaron soldados, peritos de la fiscalía y agentes de la AEI, quienes localizaron tres torsos en un pozo del rancho.
Además encontraron un hacha y barriles con combustible donde presuntamente un grupo de la delincuencia organizada "cocinaba" a sus rivales, dijeron las fuentes
También fueron localizados más restos humanos, pero los peritos no han podido precisar si pertenecen a los tres cuerpos desmembrados.
"Existe un dato para confirmar que se trata de varios cuerpos", informó Jorge Domene, portavoz del Consejo de Seguridad estatal.
Mencionó que las investigaciones que realiza la Agencia Estatal de Investigaciones determinarán si son cinco o si existen más cadáveres en una fosa clandestina que se localizó en ese lugar.
Los peritos de la fiscalía, que continuaban trabajando en la zona hasta la noche de hoy, solicitaron maquinaria pesada para seguir con las excavaciones.
El municipio de Cadereyta, donde opera un grupo de la delincuencia organizada, registra más de 50 personas desaparecidas en los últimos cuatro años, entre ellas un líder del sindicato de trabajadores petroleros y 37 obreros de la empresa estatal Pemex.
En el vecino estado de Tamaulipas, en el noreste del país, las autoridades han localizado en lo que va de este mes 183 cadáveres en 40 fosas clandestinas.
Además, en Durango, en el oeste de México, también han sido encontrados 96 restos humanos en varias fosas clandestinas.
EFE
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