Los presidentes de EE.UU. y China se reunieron ayer, sábado en Lima, tras el cierre del foro APEC. Los mandatarios resaltaron que sus países mantienen "la relación bilateral más importante del mundo".
Los presidentes de EE.UU. y China, Joe Bien y Xi Jinping, respectivamente, se reunieron ayer, sábado, en Lima, tras el cierre del Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico (APEC). El encuentro con el mandatario chino fue el tercero y último que mantuvo Biden durante su gestión.
Los presidentes reconocieron que sus países conforman "la relación bilateral más importante del mundo", al tiempo que parecieron destinar mensajes velados a Donald Trump, que en enero asumirá su segundo mandato y ha mantenido un discurso de confrontación hacia Pekín, al anunciar que incrementará en 60 % los aranceles a las importaciones chinas.
Buscaremos "la mejor manera de que las dos grandes naciones se lleven bien"
Xi Jinping aseguró que está listo para trabajar con la nueva administración de Trump, y para "mantener comunicación, expandir la cooperación y gestionar las diferencias, mientras nos esforzamos en una transición estable".
"China está dispuesta a trabajar con la nueva administración estadounidense para mantener la comunicación, ampliar la cooperación y gestionar las diferencias, a fin de esforzarse por una transición fluida de la relación entre China y Estados Unidos", aseguró en comentarios traducidos.
Xi también lanzó un mensaje de precaución que parecía más dirigido a Trump que al saliente Biden: "Los dos países deben tener presente el bienestar de sus dos pueblos y el interés común de la comunidad internacional, tomar decisiones sabias, seguir explorando la mejor manera de que las dos grandes naciones se lleven bien y alcancen una larga coexistencia pacífica".
"Estados Unidos ha concluido recientemente sus elecciones. El objetivo de China de una relación China-EE.UU. estable, sana y sostenible no ha cambiado", añadió.
Por su parte, Biden reflexionó sobre las "muchas horas" que en sus cuatro años de mandato y sus tres reuniones bilaterales ha pasado hablando con Xi y los avances que se han conseguido desde el último encuentro en Woodside (California), el año pasado, en materia de control de narcóticos, como el fentanilo, o comunicación militar.
A modo de consejo -para algunos un mensaje velado a Trump sobre cómo retomar la relación con Pekín- reflexionó: "No siempre hemos estado de acuerdo, pero nuestras conversaciones han sido siempre sinceras y francas. Nunca nos hemos burlado el uno del otro. Hemos estado al mismo nivel y creo que eso es vital".
"Nuestros dos países no pueden permitir que esta competencia derive en un conflicto. Esa es nuestra responsabilidad y creo que en los últimos cuatro años hemos demostrado que es posible tener esta relación", puntualizó Biden.
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