La decisión del Poder Judicial brasileño se da luego de la revelación periodística según la cual el mandatario avaló un soborno a un sentenciado por corrupción
El Tribunal Supremo de Brasil autorizó este jueves la investigación por obstrucción a la justicia contra Michel Temer. El presidente de Brasil es acusado de avalar el pago de una coima a un ex diputado, hoy detenido, a cambio de su silencio en un caso de corrupción.
El magistrado Edson Fachin, a cargo del caso Petrobras o ‘Lava Jato’ en el Supremo, accedió al pedido de la Procuraduría General de la República. Según informó O Globo, Temer pasará así a ser formalmente investigado como parte de este caso de corrupción, el más grande la historia de Brasil. La Constitución del país establece que un presidente soólo puede ser investigado por actos cometidos durante su mandato. La supuesta obstrucción a la justicia fue hecha por Temer en marzo, cuando ya gobernaba.
Al borde del abismo. La autorización de la investigación se da luego de que O Globo informara de la existencia de una grabación en la que Temer supuestamente avaló la compra del silencio a Eduardo Cunha, impulsor del juicio político que destituyó a Dilma Rousseff y condenado por corrupción. El exvicepresidente está en el poder desde mayo de 2016 y de forma efectiva desde el 31 de agosto, cuando Rousseff fue destituida por el Congreso como parte del juicio político por el maquillaje de las cuentas públicas.
El presidente, del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), reconoció que se reunió en marzo con Joesley Batista, el empresario de JBS que lo habría grabado, pero negó que comprara el silencio de Cunha, expresidente de la Cámara de Diputados. "El encuentro (...) ocurrió a comienzos de marzo, en el Palacio de Jaburu, pero no hubo en el diálogo nada que comprometiese la conducta del presidente de la República", dice una nota de la Presidencia brasileña.
Terremoto político. La revelación sobre el presunto soborno avalado por Michel Temer sacudió a la política y a la sociedad brasileña. Los diputados de oposición pidieron un 'impeachment' o proceso de destitución para el presidente como el que sacó a Dilma Rousseff del poder. Al pedido luego se sumaron parlamentarios del propio partido oficialista.
Bruno Aráujo, ministro de Ciudades de Brasil, renunció a su puesto en el Gobierno. En las calles, cientos de ciudadanos salieron a protestas y pedir la renuncia del mandatario. En el plano económico, la Bolsa de Valores de Sao Paulo se desplomó a consecuencia del escándalo y suspendió sus operaciones. (Con información de EFE)
Comparte esta noticia