Peña Nieta le hizo saber a Trump "que había habido malinterpretaciones que lastimaron a los mexicanos", pero en ningún momento el candidato republicano hizo un mea culpa.
El candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, escuchó este miércoles los reclamos del presidente de México, Enrique Peña Nieto, por sus comentarios discriminatorios contra los inmigrantes mexicanos en Estados Unidos, pero ni pidió perdón ni descartó la idea de construir un muro en la frontera común.
Critican reunión. En una jornada que comenzó con una tormenta de críticas a Peña Nieto por recibir a Trump en la residencia presidencial de Los Pinos, gesto calificado por algunos analistas de "error histórico" e incluso "traición", la visita, además de breve, resultó menos tensa que el ambiente creado en sus prolegómenos.
Llegada de Trump. Aterrizó Trump en el Aeropuerto Internacional de Ciudad de México procedente de California tras hacerse público el martes que aceptaba la excepcional invitación cursada a su persona y a su rival demócrata, Hillary Clinton, de reunirse con Peña Nieto. En el caso de Trump, que desde el aeropuerto se dirigió en helicóptero hasta Los Pinos, la visita llegaba cargada de resquemores por haber llamado "criminales" y "delincuentes" a los inmigrantes mexicanos en EE.UU. durante su campaña. También por su anuncio de deportar a los once millones de inmigrantes que viven de forma ilegal en su país y su advertencia de obligar a México a pagar la construcción de un muro en la frontera común.
Peña Nieto defendió a México. Luego de expresar su "respeto absoluto" por el proceso electoral estadounidense, aclaró que en una "conversación abierta y constructiva" habló con su interlocutor sobre sus ataques y le hizo "notar" la "gran responsabilidad" que tiene de "defender al pueblo de México". Le hizo ver "que había habido malinterpretaciones o afirmaciones que lamentablemente habían lastimado y afectado a los mexicanos", pero dijo estar "seguro" del "interés genuino" de Trump por "construir una relación" que dé a ambas naciones "condiciones de mayor bienestar".
Emigración de mexicanos. Comentó que la emigración de personas desde México a Estados Unidos tuvo su pico hace diez años, pero a partir de entonces ha venido disminuyendo "hasta ser negativa en términos netos". También instó a Trump y a EE.UU. a tener "un enfoque integral sobre la frontera que atienda el tránsito ilegal de personas, pero también de drogas y armas que están fortaleciendo cárteles y otras organizaciones criminales que generan violencia en México".
Trump dice respetar a mexicanos. En su intervención, el candidato republicano aseguró tener "un gran respeto" por los "mexicano-estadounidenses" y dijo conocer a "mexicanos de primera, segunda y tercera generación que viven en la Unión Americana, que son gente sin reproches, extraordinarios trabajadores. Compartimos intereses comunes en lo que respecta a la seguridad, prosperidad y libertad de nuestro hemisferio".
Frenar migración ilegal. Trump apostó por desmantelar los cárteles de las drogas y frenar la migración ilegal, incluida la procedente de Centroamérica y otras regiones, que pone "en peligro" las "finanzas" y la "seguridad" de América del Norte.
Muro fronterizo. Al terminar, cuando ambos se disponían a abandonar la comparecencia, planeada como un mensaje a los medios de comunicación sin preguntas, el invitado tomó la iniciativa de aceptar varias preguntas sobre el polémico muro fronterizo. "Es necesario poner un muro para poner un alto a la inmigración ilegal y el flujo de armas y de efectivo. Este tiene que ser un objetivo compartido. No discutimos quién va a pagar por el muro", dijo. (EFE)
Comparte esta noticia