La tensión diplomática podría afectar el intercambio comercial de Santa Rosa con las ciudades fronterizas de Leticia (Colombia) y Tabatinga (Brasil).
"La mercadería brasilera y colombiana está llegando sin problemas, productos como ajos, cebollas y otros están ingresando normal, vemos que es más un tema político que comercial"
Jorge Morales, presidente de la Cámara de Comercio, Industria y Turismo de Loreto.
La tensión diplomática entre Perú y Colombia podría afectar la economía del distrito fronterizo de Santa Rosa, zona donde el comercio es la principal actividad que mueve la economía de la zona, así lo advirtió el presidente de la Cámara de Comercio, Industria y Turismo de Loreto, Jorge Morales.
En diálogo con el programa Ampliación de Noticias Regional, Morales reconoció que en este momento no hay una afectación directa, pero advirtió que, si continúan los hechos de provocación del país vecino de Colombia, esto podrían aumentar la tensión y jugar en contra de estas actividades de intercambio que realiza todos los días el poblador de frontera.
“Actualmente las transacciones comerciales son normales. La mercadería brasilera y colombiana está llegando sin problemas, productos como ajos, cebollas y otros están ingresando normal, vemos que es más un tema político que comercial, pero creo que esto tiene que ver muchísimo con el abandono de muchos años de la frontera”, precisó.
La autoridad remarcó que la poca presencia del Estado en esta zona hace que el poblador de Santa Rosa se identifique más con los vecinos países, por las condiciones de infraestructura y desarrollo que presentan.
“Si usted mira la realidad colombiana y la brasilera, su parte económica es muy activa, frente a la horrorosa realidad peruana. Santa Rosa es un pueblo con muy poca presencia del Estado y eso hace que los moradores se integren más a Colombia y Brasil, porque hay mejores colegios, hospitales y todos esos detalles que son importantes”, remarcó.
(...)Llegamos por ejemplo a conversar con los funcionarios de Colombia. Ellos quieren ir hasta el Cusco, pero no se puede sacar un vuelo de Leticia a Iquitos, no se le da el pase a cielo abierto"
Jorge Morales, presidente de la Cámara de Comercio, Industria y Turismo de Loreto.
Prevalece el comercio informal
El representante de la Cámara de Comercio también enfatizó en que en este poblado peruano la gran mayoría del comercio es informal, ya que por la falta de embarcaciones de gran tamaño se ha perdido el comercio directo con la ciudad de Iquitos.
“No hay una naviera que traiga mercadería desde Iquitos. Se mueven embarcaciones con petróleo, que está saliendo para Manaos, por eso se consume más y se usan los servicios de Leticia y Tabatinga. La presencia del Estado podría ayudar a formalizar, pero sin presencia del estado es difícil”, añadió.
Complicaciones para el Turismo
El Turismo aún es más complicado, porque pese al interés de ambos países para realizar una conexión con Iquitos y luego a zonas turísticas del Perú, no hay permisos para vuelos que permitan la conectividad.
“Llegamos por ejemplo a conversar con los funcionarios de Colombia. Ellos quieren ir hasta el Cusco, pero no se puede sacar un vuelo de Leticia a Iquitos, no se le da el pase a cielo abierto para un vuelo regional, económico, que dinamice la economía. Nosotros tenemos un Ferri, pero ese demora 14 horas en llegar a Iquitos, cuando un vuelo llega en solo 45 minutos
Llamado a la Cancillería
También hizo un llamado a la Cancillería peruana, porque se conoce que hay una comisión binacional de Fronteras que maneja fondos para este lugar, sin embargo, no se sabe en qué se ha gastado este presupuesto hasta ahora.
“Deberíamos hacer un llamado de atención y pedirle a Cancillería que explique, que rinda cuentas de lo que se ha hecho con el fondo de Integración. Hay un fondo de frontera que no está siendo utilizado. Si uno camina por los pueblitos de Colombia y Brasil, comunidades nativas cercanas tienen la capacidad para recibir ministros, hasta el mismo presidente. Acá no podemos porque no tenemos infraestructura, eso es una negligencia del Estado”, dijo.
Reformular la estrategia de desarrollo de fronteras
Finalmente, reconoció que durante todo este tiempo solo ha existido descuido por parte del Estado para atender esta zona fronteriza y enfatizó que, si el Ejecutivo no aprovecha esta oportunidad para hacer prevalecer su soberanía, los ciudadanos seguirán inclinándose más a los pueblos de Brasil y Colombia.
“Se tiene que hacer un desarrollo sostenible. Hasta ahora hay promesas incumplidas, pero no hay acciones inmediatas. No ha funcionado la estrategia de desarrollo en zonas de frontera, no ha funcionado nunca nada, han sido solo saludos a la bandera”, finalizó.