Un modelo estadístico del Instituto Aklla revela que la nueva barrera electoral reconfigurará el mapa político: solo las fuerzas con arraigo nacional ingresarían al reparto de escaños y la mayoría de partidos medianos quedarían fuera.
Un modelo estadístico proyecta cómo se distribuirían los 130 escaños de la nueva Cámara de Diputados si los resultados de la encuesta presidencial de Ipsos–Perú21 de noviembre se replicaran en las urnas. Con el regreso de la bicameralidad, es decir, el parlamento conformado por 60 senadores y 130 diputados. Las agrupaciones políticas deberán obtener el 5% de votos válidos a nivel nacional y el 5% del número legal de representantes en cada cámara, es decir, siete diputados y tres senadores para superar la valla electora.
Según el estudio de Aklla, la intención de voto presidencial refleja la votación para diputados. Aunque no es una equivalencia perfecta, la consultora señala que históricamente los partidos con mejor performance presidencial suelen tener presencia significativa en el Legislativo.
Según el ejercicio estadístico de Aklla, la Cámara de Diputados quedaría así:
Renovación Popular: 42 curules
- Perú Primero: 35 curules
Fuerza Popular: 34 curules
País para Todos: 19 curules
Estas agrupaciones se ubican en los primeros lugares de intención de voto y, bajo el nuevo diseño electoral, tendrían la mayor presencia en la futura Cámara de Diputados. Durante el programa Ampliación de Noticias de RPP, José Tello, exministro de justicia y miembro de Aklla, explicó que la proyección parte de un criterio técnico habitual en estudios electorales:
“La medición se ha hecho respecto a la intención de voto presidencial. Puede darse el voto cruzado, pero normalmente hay un arrastre muy importante desde la votación presidencial”.
En otras palabras, los candidatos a la Presidencia siguen siendo el principal motor del voto legislativo, y eso se refleja en la simulación de escaños elaborada por Aklla. Además, José Tello explicó que advirtió sobre las consecuencias que podría tener este rediseño para ciertos sectores: “Se podría tener un oficialismo y oposición más consolidada, pero resulta preocupante porque algunos espacios políticos, como la izquierda, no tendrían representación”.
Este escenario obliga a replantear estrategias electorales: “Es un momento en el que las fuerzas políticas deben pensar en hacer coaliciones en torno a candidaturas que tengan posibilidades reales”, señaló.
El experto recordó que el sistema electoral peruano ya ha mostrado, en elecciones anteriores, cómo funciona la fórmula de cifra repartidora y el peso de la barrera electoral.
2016: Fuerza Popular obtuvo 76 congresistas con 30% de la votación congresal.
2021: Perú Libre logró 37 escaños con 18% de los votos válidos.
Tello señala que estos ejemplos evidencian el impacto del método de asignación: “Tenemos mediciones que nos hacen ver cómo la cifra repartidora genera el efecto en el cual un partido que logra pasar la valla congresal del 5% reparte escaños de manera significativa”.
Además, recordó que en 2021 más de 2.5 millones de votos se quedaron sin representación parlamentaria porque las organizaciones no superaron la valla electoral.
¿Cómo Aklla estimó la composición de la Cámara de Diputados?
Se dividió el país en cinco zonas geográficas (Lima, Norte, Centro, Sur y Oriente).
Se asignaron los votos a los 27 distritos electorales según proporción poblacional.
Se aplicó un modelo estadístico tipo Dirichlet-multinomial, que simula 1000 posibles escenarios por zona con el margen de error de ±2.5% de la encuesta.
Solo ingresan al reparto los partidos que superan la barrera electoral.
Se asignaron los 130 escaños por cifra repartidora en cada circunscripción.