EE.UU. planea emitir hasta U$D 1 billón en bonos en la segunda mitad de este año, presionando al mercado de deuda y liquidez.
El mercado de bonos de EE.UU. está en alerta máxima tras un anuncio que podría marcar un hito histórico: hasta U$D 1 billón en nueva deuda pública se prevé emitir en la segunda mitad de 2025, una cifra sin precedentes. Esta medida responde al creciente déficit fiscal, alimentado por recortes tributarios y aumento del gasto gubernamental.
La emisión se concentraría en instrumentos de corto plazo, como letras del Tesoro, y se realizaría principalmente en agosto y septiembre. Analistas advierten que esta avalancha podría influir en tasas de interés de corto plazo y mercados de repos o acuerdos de recompra.
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Estrategias y desafíos del mercado
Banqueros y estrategas, como Mark Cabana de BoFA y Gennadiy Goldberg de TD Securities, señalan que la liquidez será clave para absorber la oferta. Los fondos del mercado monetario, con activos en torno a U$D 7.4 billones, podrían mitigar el impacto.
Sin embargo, el aumento de oferta podría presionar a la baja los repurchase rates en el corto plazo y requerir ajustes en las subastas del Tesoro. El dilema es cómo equilibrar la necesidad de financiamiento con la estabilidad del mercado.
Riesgos políticos y efectos macroeconómicos
El plan de endeudamiento llega con la negociación del techo de deuda aún pendiente, lo que añade incertidumbre política. Si el Congreso demora el acuerdo, el Tesoro deberá recurrir a soluciones de emergencia, generando tensión en mercados globales.
Además, el exceso de deuda podría comprometer la capacidad del gobierno para responder ante crisis futuras. El balance entre financiar necesidades actuales y mantener la confianza de los inversionistas será uno de los principales retos de la administración Trump y de la Reserva Federal.