Un operativo sorpresa de ICE en Nashville terminó con la captura de un miembro de una importante red criminal internacional. ¿De quién se trata?
Durante un operativo en Nashville, las autoridades del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) detuvieron a 196 personas. Sin embargo, lo más sorprendente fue que entre los arrestados se encontraba un integrante de una conocida red criminal internacional.
Los agentes habían organizado esta operación con el objetivo de ubicar a personas con antecedentes o situaciones migratorias irregulares. No obstante, el hallazgo de este individuo vinculado a una peligrosa organización criminal le dio un giro inesperado al operativo, dejando clara la importancia de este tipo de controles.
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Nashville: Operativo de ICE acabó con este sorpresivo arresto
Durante una reciente operación en Nashville, Franklin Oswaldo Velásquez fue uno de los arrestados que más llamó la atención. Al ser procesado, las autoridades descubrieron que era un inmigrante salvadoreño con lazos directos con la pandilla MS-13, también conocida como Mara Salvatrucha, una de las organizaciones criminales más peligrosas de América Latina.
Velásquez, de 33 años, había ingresado ilegalmente a Estados Unidos y era buscado en El Salvador por homicidio agravado, motivo por el cual tenía activa una notificación roja de Interpol. Además de eso, ya tenía un importante historial delictivo en territorio estadounidense por delitos relacionados con drogas, suplantación de identidad e incomparecencia ante la justicia.
Pese a la gravedad de sus antecedentes, las autoridades no revelaron qué pasará exactamente con Velásquez, aunque dejaron claro que se hará cumplir la ley. Según indicaron voceros del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés), el objetivo es seguir sacando de circulación a personas con vínculos criminales que representen un riesgo para la comunidad.
En total, fueron detenidos 196 inmigrantes durante este operativo, que contó con el trabajo conjunto de 287 agentes, incluyendo personal del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) y la Patrulla de Carreteras de Tennessee. Aunque no se revelaron todos los nombres, se supo que algunos de los arrestados enfrentaban cargos por delitos como robo, violación y narcotráfico.
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