Tres generaciones (un adulto mayor, una joven y un niño) como testigos de su tiempo para comentar cuánto ha variado las tradiciones y costumbres navideñas.
¿Cuánto ha cambiado la Navidad?
Una mirada intergeneracional sobre una de las mayores celebraciones del mundo cristiano. Miguel Humberto Aguirre contrasta la Navidad que le tocó vivir de niño con las de Diana Pozo, joven reportera y la de Marcelo, un niño que a los doce años tiene una visión muy especial sobre el nacimiento de Jesús.
Recuerdos y anécdotas sobre las tradiciones y costumbres previas, durante y después de la Navidad que les tocó vivir como testigos de su tiempo.
¿Quiénes preparaban los nacimientos y el àrbol?
Una tradiciòn que no ha variado mucho, porque los protagonistas siguen siendo los mismos: La familia que con entusiasmo "adorna" la casa para recibir simbólicamente al niño Jesús. Los hay de todos los tamaños y formas, pero el espíritu que impulsa a prepararlos es el mismo.
Algunos lo hacen con pinos reales, otros de plásticos, pero los árboles es el elemento infaltable en un hogar para recibir la Navidad.
Cuando las tarjetas navideñas eran impresas
Para los niños de hoy, auténticos "nativos digitales", las tarjetas impresas son prácticamente raras, pues están acostumbrados a enviar sus saludos echando mano de las tecnologías que les permiten "personalizar" sus saludos y diseños.
Cosa diferente a lo que les tocó vivir a los que sobrepasan los 30 años, cuando era una "obligación" buscar una en el abanico de posibilidades, la cual debía tener una dedicatoria escrita con la mejor letra posible.
Celebrar la Navidad en tiempos de internet
El uso del internet ha globalizado no solo la información sino también la celebración navideña, pues si antes era común las llamadas de larga distancia para saludar a los amigos y familiares que estaban lejos, hoy podemos vivir la fecha "en tiempo real" a través de las herramientas tecnológicas como el Skipe, el periscope, etc.
De tal forma, que si tenemos a seres queridos al otro lado del mundo, podemos brindar simbólicamente con ellos, a pesar de la diferencia horaria y la distancia. Hablar a a los jóvenes y niños de telegramas o fax, suena a tiempos remotos, aunque hayan dejado de usarse no hace mucho.
Navidad será siempre una oportunidad de reunión familiar y amical, pero ante todo, de reconciliación. Pueden haber cambiado algunos usos, tradiciones y costumbres, pero el espíritu que anima celebrar el nacimiento de Jesús no. En esencia sigue siendo la misma, pues es sinónimo de amor.
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