Aún no se ha podido determinar la cantidad de humo a la que se deben exponer las personas para presentar algún daño en el órgano auditivo.
Los fumadores pasivos, que no consumen cigarrillos pero respiran el humo del tabaco de otros, tienen un alto riesgo de sufrir sordera, sostiene un estudio que publica la revista "Tobacco Control".
"El humo del cigarrillo obstruye el flujo sanguíneo en los vasos del oído, provocando que la falta de oxígeno en el oído propicie la acumulación de desechos,” señaló el doctor Ralph Home, responsable del estudio.
Estas lesiones son distintas a las causadas por la exposición al ruido o por la vejez. En el estudio, los investigadores de las universidades de Miami y la Internacional de Florida sometieron a 3.307 individuos a pruebas de oído.
Sin embargo, aún no se ha podido determinar la cantidad de humo a la que se deben exponer las personas para presentar algún daño en el órgano auditivo.
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