Indecopi retiró del mercado cerca de 87,000 multiprotectores solares para niños por provocar irritación en la piel de los menores. ¿Cómo diferenciar los tipos de bloqueador para elegir la mejor opción?
Salud
Para elegir un bloqueador, verifique que contenga Factor de protección solar contra radiación UVV y UVA, e incluso contra la radiación infrarroja.
No todos los bloqueadores solares nos ofrecen una protección total del sol. Luego de que Indecopi retirara del mercado alrededor de 87,000 unidades de multiprotector solar de rostro y cuerpo para niños de Factor de Protección Solar (FPS) 50, surge la duda de si los productos que se usan para combatir los rayos solares son realmente efectivos para esa misión.
Un producto no eficaz provocaría una eventual irritación dérmica leve temporal o reversible en los niños, según recoge la denuncia de Indecopi. Giuliana Nieto, dermatóloga de ESSALUD, nos explica que para estar protegidos es imprescindible utilizar un fotoprotector adecuado según nuestro tipo de piel, ya sea un filtro o un bloqueador solar.
“El filtro solar es un producto elaborado a partir de diferentes fórmulas químicas que sirve para la absorción de la radiación ultravioleta. Funcionan como una pantalla física y evita que los rayos solares penetren la piel. Los más comunes contienen dióxido de titanio, un elemento que forman parte de la composición de los bloqueadores para niños”, dice la especialista.
Niños y adultos mayores. La exposición al sol debe ser restringida para grupos de piel sensible como niños, personas con acné o rosácea y adultos mayores. Para los niños, comenta el dermatólogo José Luis Ballesteros, es recomendable un bloqueador con filtro solar, un elemento que convierte a la crema en una sustancia más densa y que refleja la radiación.
“Se debe tener mayor cuidado con la piel de los menores de 6 meses de edad. Además, los bebés hasta los 18 meses no se deben exponer directamente al sol”, explica.
Por su parte, para reconocer un buen bloqueador, Giuliana Nieto recomienda verificar que el empaque indique que este contiene Factor de Protección Solar contra radiación UVV y UVA, e incluso contra la radiación infrarroja.
“Debe tener más de factor 50. Si bien los factores mayores contienen lo mismo que este, se diferencian por el tiempo de aplicación que varía entre 3 a 7 horas”, afirma el especialista.
Fotosensiblidad. De acuerdo con los especialistas una piel sensible a la radiación puede llegar a presentar daño a nivel de la epidermis, picazón o ampollas. Ballesteros acota: “El fototipo de piel puede determinar problemas de sensibilidad. Por ejemplo, las personas de piel más oscura tienen una protección natural, ya que la melanina funciona como una pantalla ante la radiación. Sin embargo, pueden tener daño a la piel”.
Comparte esta noticia