Aunque muchas personas asocian la vejez con el deterioro físico y mental, hay quienes desafían esa idea y llegan a los 80 años o más en excelente estado de salud. ¿Qué los hace distintos y cómo puedes tú también alcanzar esa etapa de la vida en óptimas condiciones?
Llegar a los 80 años marca un punto clave en la vida de los adultos mayores. A partir de esa edad, muchas personas experimentan una serie de cambios importantes: mayor fragilidad física, más propensión a enfermedades crónicas, y transformaciones en su entorno social, como la viudez. Todos estos factores suelen hacer a las personas mayores más vulnerables. Sin embargo, no todos envejecen de la misma manera.
Existe un grupo excepcional de adultos mayores que, tras superar los 80 años, se mantienen física y cognitivamente saludables, sin enfermedades crónicas y con una vida activa. A estos hombres y mujeres se les conoce como "super envejecientes". Pero ¿qué los hace diferentes?
De acuerdo con la médico geriatra Paola Casas, hay varios factores que influyen para que una persona pueda envejecer de forma saludable. Uno de los más importantes es haber tenido hábitos saludables desde edades tempranas. Mantener una alimentación balanceada y realizar actividad física de manera constante no solo ayuda a vivir mejor en el presente, sino que también prepara el cuerpo y la mente para llegar con fuerza y vitalidad a edades avanzadas. Si estos hábitos se conservan más allá de los 60 años, las probabilidades de convertirse en un "super envejeciente" aumentan considerablemente.
No obstante, el estilo de vida no es el único elemento que influye. Existen también factores externos conocidos como determinantes sociales de la salud. Entre ellos se encuentran el nivel socioeconómico, el acceso a la educación, los servicios de salud, el círculo social, y las redes de apoyo familiar y comunitario. Todos estos elementos, aunque estén fuera del control directo de la persona, juegan un papel crucial en su bienestar a largo plazo.
Curiosamente, la genética no es el factor principal que determina si una persona será o no un "super envejeciente". Según la doctora Casas, no hay un gen específico que asegure una vejez saludable. Por eso, se enfatiza la importancia de los hábitos de vida y las condiciones sociales como los verdaderos pilares del envejecimiento exitoso.
En ese sentido, convertirse en un "super envejeciente" no es cuestión de suerte, sino el resultado de decisiones, oportunidades y contextos que acompañan a una persona durante toda su vida. Adoptar desde ahora un estilo de vida saludable y fortalecer los lazos sociales puede marcar la diferencia para envejecer con calidad y plenitud.