Científicos hallan una relación estrecha entre el riesgo de desarrollar un cáncer de mama y una alteración en un gen denominado ATM, que se encuentra en los glóbulos blancos de la sangre.
Científicos británicos han desarrollado un nuevo test genético que podría anticipar varios años el diagnóstico de algunos tipos de cáncer de mama y adelantarse así a la aparición de la enfermedad, informó la cadena BBC.
El estudio, liderado por el investigador del Imperial College de Londres James Flanagan, cuyos resultados publica la revista "Cancer Research", consistió en analizar muestras de sangre de 1.380 mujeres de varias edades, de las cuales 640 desarrollaron con el tiempo un tumor de mama.
El objetivo era averiguar la influencia de factores medioambientales, como el alcohol o las hormonas, en los cambios genéticos que producen que una de cada cinco mujeres tenga el doble de riesgo de padecer esta enfermedad.
Así, los científicos hallaron una relación estrecha entre el riesgo de desarrollar un cáncer de mama y una alteración en un gen denominado ATM, que se encuentra en los glóbulos blancos de la sangre.
Esta modificación genética se producía sobre todo en aquellas mujeres cuyo gen ATM estaba expuesto a un nivel alto de metilación, un proceso químico que regula la activación o silenciamiento de los genes.
Según los expertos, estas mujeres tenían el doble de probabilidades de desarrollar un cáncer de mama en comparación con aquellas que mostraban niveles bajos de metilación y en algunos casos estos cambios eran evidentes hasta once años antes de que el tumor fuese diagnosticado.
El reto ahora es averiguar cómo incorporar esta nueva información a los modelos por ordenador que se utilizan en la actualidad para predecir el riesgo de cada persona, explicó el investigador.
Con su descubrimiento, Flanagan espera que en pocos años se pueda diagnosticar el cáncer de mama mediante la combinación de un análisis de sangre, el historial familiar y el estudio del ADN de cada persona, varios años antes de que aparezca la enfermedad.
Ello permitiría realizar un seguimiento de la evolución de la mujer y ofrecerle un tratamiento preventivo.
EFE
Comparte esta noticia