Según Datum Internacional, el 78% de mujeres peruanas considera que en el país no se respetan sus derechos. El machismo y los estereotipos están entre las principales causas. Aprende a identificar las frases y actitudes que implican violencia.
Cualquier tipo de relación, sea personal, familiar, laboral o amorosa, puede implicar violencia de género que muchas veces pasamos por alto. Según Datum Internacional, el 78% de mujeres peruanas considera que en el país no se respetan sus derechos, cifras preocupantes que tienen que ver también con el machismo.
Uno de los tipos más difíciles de identificar es la violencia simbólica, pues está normalizada en la sociedad y tiene que ver directamente con los estereotipos, convirtiendo en algo natural aquello que es realmente ofensivo y desigual. Otro tipo es la violencia psicológica, que afecta la autoestima de las mujeres a través de ataques verbales, poniendo en duda la capacidad, manipulando y afectando su dignidad.
¿Cómo identificar estos tipos de violencia?
Las víctimas no siempre son conscientes de que están sufriendo violencia, incluso muchas veces los amigos y familiares cercanos tampoco saben identificar cuándo realmente se trata de un caso de maltrato, por lo que no tienen cómo ayudar a las víctimas.
Según datos de INEI, 3 de cada 10 mujeres peruanas de 15 a 49 años ha sufrido alguna vez violencia física por parte de su esposo o compañero. Identificar las señales es importante para denunciar y evitar que se repita lo mismo con otras mujeres. Aquí algunas de ellas:
Los insultos y ataques: Los insultos de cualquier tipo son señales de violencia. Si te hace sentir insegura y siempre subestima tu capacidad o cuestiona todo lo que haces también debes empezar a tomar distancia y alejarte.
El control excesivo: Ya sea desde revisar el celular hasta controlar todo el día dónde o con quién estás. Si te dicen qué debes y qué no debes hacer con tu vida, por lo que no tienes derecho a opinar, debes empezar a tomar distancia.
Manipulación emocional o económica: De igual manera, los chantajes donde el miedo es el protagonista, así como la manipulación para hacer cosas que no quieres o que van en contra de tus valores demuestran que se trata de una relación no saludable.
Si evitas dar opiniones por temor: No es normal ningún tipo de humillación o intimidación. Si tienes miedo de dar opiniones para evitar quedar en ridículo o por temor a que te griten, también estás siendo víctima de violencia.
La burla constante: Ya sea por cómo te vistes, cómo luces o porque te equivocas en algo. Si se trata de una persona que siempre está pendiente de tus errores para hacerte sentir mal, debes hacer un alto.
En cuanto a la violencia simbólica, existen algunas frases que solemos escuchar a diario pero que guardan detrás machismo y desigualdad. De acuerdo con encuestas de 2016 de Datum, el 74% considera que el Perú es una sociedad machista. Aquí algunas frases que camuflan violencia de género:
Critican cómo te ves o te dicen cómo debes verte: Cuando te dicen que tu cuerpo o la forma como te ves no está bien o cuando quieren decirte qué puedes o no hacer. Frases como: “las mujeres siempre deben comportarse y verse bien arregladitas”, “compórtate como niña, cierra las piernas”, “una mujer no debe viajar sola”, “tienes que ser más femenina”, “no uses faldas cortas sino después no te quejes de lo que te pasa”.
Si limitan tu rol a connotaciones sexuales: Principalmente se presenta en acoso callejero, una de las formas de violencia diaria. Pasar por la calle y que otros hombres griten cosas no es normal y debe ser denunciado. De acuerdo con Datum, el 41% de mujeres ha padecido algún tipo de hostigamiento en el trabajo, centro de estudios o en algún otro lugar en el Perú.
Si limitan tu rol a ser madre: Pensar y obligar a que las mujeres, solo por serlo, deben cumplir un rol de madres es otra forma de violencia simbólica. Frases como: “a ti ya se te pasa el tren, apúrate”, “los hijos son de la madre”, “eres mujer, tienes que tener hijos”, implican falta de respeto por la decisión personal y constituyen una forma de violencia.
Los estereotipos: Generalmente pasan desapercibidos porque se asumen como normales en la sociedad y a veces se presentan con frases en tono de burla o como chistes. Por ejemplo: “el hombre es el que manda en el hogar”, “detrás de un hombre hay una gran mujer”, “el fútbol es para machos”, “calladita te ves más bonita” o “mujer que no molesta, es hombre”.
Si eres víctima o testigo de algún tipo de violencia de género no dudes en denunciarlo llamando gratuitamente a la Línea 100. Recuerda que la indiferencia también es violencia.
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