Por fortuna, la roca no ha detenido las operaciones de Perseverance en el suelo marciano.
Durante los últimos 4 meses, el rover Perseverance de la NASA en Marte ha tenido un compañero de viaje inesperado: una piedra en la rueda delantera izquierda recogida 8,5 kilómetros atrás.
Esta roca no le está haciendo ningún daño a la rueda, pero a lo largo de su viaje, se ha adherido y ha hecho apariciones periódicas en las imágenes de la cámara Hazcam izquierda.
La mascota de los viajes
Esta no es la primera vez que una roca se monta en una misión de rover de Marte. Hace unos 18 años, una piedra del "tamaño de una papa" se abrió camino hacia la rueda trasera derecha del vehículo Spirit y tuvo que ser desalojada. En el rover Curiosity, la rueda delantera derecha ha recogido periódicamente esta clase de compañeros de viaje, explica el blog de la misión.
Si bien no está claro exactamente cuánto tiempo se quedaron estas rocas, tendieron a saltar después de unas pocas semanas. Por lo tanto, el compañero actual de Perseverance está en camino de establecer récords de autostop en Marte.
La roca mascota de Perseverance está ahora muy lejos de su entorno original. Cuando quedo dentro de la rueda, el rover examinaba el suelo del cráter Jezero, concretamente rocas que se piensa están formadas por flujos de lava. Luego se dirigió al norte a través del sitio de aterrizaje del rover y luego al oeste en dirección a la actual localización en el antiguo delta del cráter, donde ahora se buscan rocas sedimentarias. (Europa Press)
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