No es amante del terror, pero Ewan McGregor lidera ahora la secuela de "El resplandor", que se estrena el 7 de noviembre. Tampoco le teme a las críticas de los fans de Stephen King o Stanley Kubrick.
Nadie le puede negar arrojo a Ewan McGregor. No es amante del terror, pero lidera ahora la secuela de "El resplandor". Y no teme las críticas de los seguidores acérrimos de Stephen King o Stanley Kubrick, ya que no se siente obligado ante ellos porque, dice, la película "Doctor Sueño" tiene su propia vida.
"No siento responsabilidad ante los fans de 'El resplandor': pueden seguir amándola, no le resta valor", aseguró un actor conocido por su amabilidad y simpatía y que ahora se adentra en un inquietante mundo con esta cinta, que se estrena el 7 de noviembre, bajo la dirección de Mike Flanagan.
"Mi única preocupación no era tanto lo que pensaran los fans, sino lo que la gente pudiera sentir si van a ver una película que quieren que sea 'El resplandor' otra vez. Y no van a tener eso porque esta es muy diferente (...). Pero, de cualquier forma, ese no es mi problema", dijo tras soltar una risa.
Con la dura tarea de dar continuidad a las dos visiones de Stephen King o Stanley Kubrick (el escritor odia la película que se hizo de su libro), "Doctor Sueño" se centra en el niño Danny Torrance quien, ya como adulto (Ewan McGregor), lidia con su alcoholismo mientras ayuda con sus poderes mentales a Abra (Kyliegh Curran), una adolescente con habilidades extraordinarias.
Aunque no es fan del cine de terror, a McGregor le interesó la historia de Danny y la exploración de su adicción y alcoholismo. "'El resplandor' va sobre un adicto, sobre la vida de un alcohólico y sobre ser el hijo de un alcohólico. Pero esta va de la rehabilitación y la sobriedad", apuntó.
Si bien la mayoría de películas de terror se centran en el trauma o el dolor, "Doctor Sueño" se enfoca en la sanación y la cura. "Creo que parte de la sobriedad es enfrentarte a ti mismo, a las cosas de ti que no te gustan, a tus miedos y demonios y ser capaz de quitarles su poder (...). Para estar en paz en tu vida y encontrar tranquilidad, tienes que mirar a las cosas de las que más te avergüenzas y pensar: 'Bien, hice eso, pero eso era antes y este soy yo ahora'".
A pesar de su reputación, a Ewan McGregor no le interesaba ver "El resplandor". No fue hasta que se puso a estudiar los trabajos de grandes actores, como Jack Nicholson, que la descubrió y le impresionó. "Es aterradora y da miedo, pero no es una película de terror para mí. Es Stanley Kubrick en plan psicológico: es una cinta desconcertante, retorcida y aterradora", resaltó. (EFE)
Comparte esta noticia