RPP Noticias recorrió una de las seis cunas de la civilización en el planeta, ubicada en el distrito limeño de Pueblo Libre.
El Museo Larco contiene la historia del Perú precolombino, sus inicios, la expansión y el imperio incaico. Rafael Larco Hoyle, al tener la colección como herencia de su padre, decidió abrir esta exposición en el año 1926 en la hacienda Chiclín, Lambayeque. Luego, en la década del 50, trasladan la muestra a Lima.
Ahora está en una casona del año 1700 que perteneció a la familia Luna Cartland y tras el paso del tiempo tomó el nombre que lleva actualmente. Sus instalaciones fueron adaptándose para brindar una experiencia satisfactoria y gratificante a los visitantes.
Recorrido. Uno de los beneficios de visitar el lugar es que te ofrece una exposición permanente que cuenta la historia de formación de una de las seis cunas de la civilización en el planeta y que a su vez se divide en siete épocas: la pre cerámica, inicial de cerámica, formativa, auge, fusional, imperial y conquista.
Debido a la cantidad de visitantes extranjeros que siempre llega al Museo Larco, la exposición está traducida en siete idiomas, español, inglés, francés, italiano, portugués, japonés y alemán. Esto forma parte de la implementación que se hizo en 2010.
Historia. La visita a esta exhibición no tiene un inicio específico, pero es recomendable empezar por el lado más antiguo del Perú, para conocer que nuestra historia no se basa en la época incaica únicamente, sino que antes de esta hay 4500 años de cultura aproximadamente.
En la Galería de las Culturas se exponen varias piezas resaltantes como la figura de transición del chamán al felino, que pertenece al movimiento Cupisnique, o la combinación de animales como el felino, ave y serpiente, ambas de la cultura Mochica.
El inicio. La mayor parte de esta colección es Mochica, muestra las diferentes etapas que tuvo esta cultura y se dice que alberga la más completa historia precolombina del Perú. Aquí se encuentra la cabeza del señor sacerdote, primera pieza de la colección de Rafael Larco Hoyle.
Además observamos los diferentes tipos de cerámicas, con variadas formas y tamaños, que dividen las épocas dentro de la cultura. Muchas de estas piezas representan historias dentro en la pintura. Aquí destacamos la gran colección sobre esta civilización.
Seguimos avanzando y encontramos la Galería Textil, aquí se puede encontrar los mantos y tejidos de pluma de la cultura Nasca. Además de deleitarse con los colores naturales, tenemos tejidos con diferentes figuras que sirvieron para la cultura de la época.
La sala de la Ceremonia del Sacrificio fue la siguiente en el recorrido y a diferencia de las anteriores el cuarto tiene poca luz, es por eso que resalta no tanto por sus figuras, sino por el color rojo de sus paredes, que significan lo más preciado de esta época: la sangre.
Más adelante tenemos a la Galería de Joyas donde hallamos dos tipos de accesorios, los bañados en oro y los que están hechos de plata. Aquí podemos encontrar los accesorios que usaban la gente de la realeza como collares, aretes, entre otros.
La figura más resaltante de esta sala es la que muestra un conjunto completo de cobre, que a primera vista parece oro, y que fue motivo por el cual los españoles asesinaron a los incas en su mayoría, pues consideraron que se trataba de un acto de brujería. Algunos siglos después se descubrió que solo contaban con un 40% del elemento dorado.
Al salir de la galería, el visitante encuentra el Depósito donde están las piezas que no pertenecen a las Galerías. Aquí podemos encontrar tres pasadizos con aproximadamente 45000 piezas de diferentes culturas, pero que están colocadas de forma ordenada, como vasos ceremoniales, los animales, entre otros.
Las piezas que encontramos son parte de la colección personal que tuvo Rafael Larco Hoyle. Toda esta sección está clasificada y cuidada por la curadora del lugar, Isabel Collazos. Ella también se encarga que los contenidos lleguen al público visitante.
Finalmente el público puede descender al primer nivel para encontrar la Galería Erótica, que relata la íntima unión de los habitantes con la naturaleza, ya sea de forma sexual o el momento en que la madre trae al mundo a su hijo.
Además del contacto entre humano y naturaleza, podemos conocer la interacción de la cultura con la producción agrícola y los rituales del sacrificio. Esta colección pertenece a los objetos hallados en la década de 1960 por Rafael Larco Hoyle.
A la visita se suma una de las experiencias más placenteras para el visitante: el área gastronómica. El café - restaurant es un lugar para tomarse una pausa, como dice el director Andrés Álvarez Calderón para "recobrar las energías y seguir la visita”.
El Museo Larco está ubicado en el distrito de Pueblo Libre, es un espacio donde se puede disfrutar y comprender la fascinante historia del antiguo Perú. Las visitas son de lunes a domingo de 9 de la mañana a 10 de la noche.
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