La ilustradora argentina se encuentra en Perú para presentar su nuevo libro en la FIL Lima 2019 y para hablar sobre la importancia de la ilustración en la literatura infantil.
Mariana Ruiz Johnson estudió en Bellas Artes con la intención de ser pintora o artista plástica, pero la vida la llevó por caminos inciertos: luego de llevar un taller de ilustración decidió dedicarse por completo a ese mundo y empezar a crear libros ilustrados para niños.
“Quería trasladar mis dibujos a las páginas de un libro, porque los niños son grandes lectores de imágenes”, dice mientras sostiene su más reciente entrega, “La gallina y el monstruo”, que presentará este miércoles 24 de junio a las 6:00 p.m. en el Teatrín de la Feria Internacional del Libro de Lima 2019.
Los niños toman un libro, contemplan las imágenes que ven y dejan volar su imaginación. Mariana sabe que, en ese aprendizaje, las ilustraciones son cruciales. “Creo que los libros ilustrados son una gran herramienta para expandir la mente de los niños y también es positivo porque constituye un primer acercamiento al mundo literario”, explica a RPP Noticias y agrega que los más pequeños encuentran en una misma obra infinitas posibilidades de lectura.
“El vínculo que tienen con la imagen es muy poderoso”
Para Mariana, que conoce de cerca la forma en la que los niños leen un libro, el vínculo temprano con el mismo es muy importante y emocional, pues tiene la característica de mantenerse para el resto de sus vidas.
Además, aclara que la lectura es un momento de calma, en el que el niño puede pautar el ritmo con el que comprende, poco a poco, una historia. Otro beneficio es el contacto con el mediador —que por lo general es el padre o la madre—, pues se genera un momento de cercanía corporal entre ambos y una conexión especial.
“Les diría a los padres que permitan que los niños se acerquen solos a los libros: dejen que el niño se enamore de un libro, ese es mi consejo”, comentó la ilustradora.
“Yo soy feminista”
Mariana no tiene miedo de autodenominarse feminista. Sabe que este aspecto y otros que forman parte de su línea de pensamiento se reflejan, naturalmente, en cada una de sus ilustraciones sin tener que forzarlo.
“Creo que es importante que las editoriales tengan un criterio feminista, pero se tiene que dar de manera natural. Yo soy feminista y trato de trabajar personajes que no tengan estereotipos de género e incluso creo algunos que no tienen un género definido”, revela la ilustradora.
Comparte esta noticia