La derogatoria de la Ley 31143, conocida como “Ley contra la usura” fue rechazada por el Pleno en segunda votación. Jorge Antonio Delgado Aguirre, Past-Presidente del Consejo Directivo de la Asociación Latinoamericana de Microfinanzas (ALAMI), criticó la decisión e instó a los congresistas a participar más en sus comisiones de manera informada.
El Pleno del Congreso de la República rechazó, en segunda votación, el texto sustitutorio recaído en el dictamen que proponía derogar la Ley 31143, norma que protege a los consumidores de servicios financieros frente a prácticas de usura.
En efecto, el proyecto proponía volver al esquema previo a la Ley 31143, en el que el BCR no fijaba topes obligatorios, sino que las tasas eran determinadas por el mercado financiero. Sin embargo, el texto del proyecto señalaba que el BCR seguiría teniendo capacidad regulatoria en caso de necesidad, pero no fijaría tasas máximas de forma permanente.
Al respecto, Jorge Antonio Delgado Aguirre, Past-Presidente del Consejo Directivo de la Asociación Latinoamericana de Microfinanzas (ALAMI), lamentó el resultado de la votación con la no derogación de esta normativa al considerar que impacta negativamente en los "empresarios de microempresa y en el sistema de instituciones microfinancieras no bancarias al no permitir seguir desarrollando la inclusión productiva".
“Es un tema técnico, no político. Al ser técnico se debe tener en consideración a entidades como el BCR, MEF y SBS y otros actores importantes que son los que conviven y financian a este sector de la inclusión financiera productiva, que han sido dejados de lado y no se toman en consideración”, dijo a RPP.
Impacto en los empresarios
Delgado Aguirre advirtió que los principales perjudicados son los microempresarios, como los dueños de bodegas, peluquería, y pequeños negocios en general, ya que son ellos quienes acuden a las instituciones microfinancieras no bancarias (cajas rurales, financieras, y cajas municipales) en busca de financiamiento.
“Se está empujando a estas personas a los prestamos ‘gota a gota’. Hay más de 600 mil hogares urbanos que recurrieron a ellos y enfrentaron tasas superiores al 500%”, añadió.
Explicó, además, que el proceso de inclusión financiera comienza con la proyección de un balance del emprendedor, basado no solo en cifras actuales, sino en el potencial de crecimiento del negocio. Esta evaluación permite determinar si el solicitante podrá afrontar tanto el pago del crédito como los gastos familiares. Con el tiempo, y al demostrar puntualidad en sus pagos, el emprendedor construye un historial crediticio que le da acceso a mejores condiciones, como tasas de interés más bajas, producto de la competencia entre entidades financieras.
“Esa es la competencia que existe desde hace más de 35 años en el Perú para fomentar la inclusión. En lugar de fortalecerla, con esta medida lo que se está haciendo es impedir que más personas accedan al sistema financiero formal”, advirtió.
En ese sentido, consideró inaceptable permitir que el "gota a gota" opere con su "red del terror, extorsión y muerte ante la indiferencia y falta de preocupación de las autoridades”.
“No se necesitan "discursos vacíos", sino políticas que protejan y brinden financiamiento formal a estos empresarios, ya que la indiferencia ante este tema se convierte en violencia”, acotó.
Votos en el Congreso
En diciembre de 2024, el Pleno del Congreso aprobó en primera votación, con 82 votos a favor, la derogación de la Ley 31143. En marzo de este año, la medida fue respaldada en segunda votación; sin embargo, se presentó una reconsideración debido a un error en el conteo de votos. Finalmente, el 11 de junio se volvió a someter a votación, pero no alcanzó los votos necesarios para su aprobación.
El representante de ALAMI ijo esperar que en la próxima legislatura se evalúe la reconsideración de la segunda votación e instó a los congresistas a participar más en sus comisiones de manera informada y a que las votaciones sean presenciales para argumentar técnicamente.
Asimismo, enfatizó en que el Congreso debería enfocarse en cómo fomentar la formalización de los empresarios y emprendedores brindándoles mejores herramientas para acceder al sistema financiero formal en condiciones más favorables. “Los microempresarios son el corazón de la economía”, puntualizó.